Paraderos

Permanente batalla por PEMEX y su consolidación

El presidente Andrés Manuel López Obrador y la presidenta electa Claudia Sheinbaum tienen perfectamente claros los motivos por los cuales existe actualmente una intensa campaña contra Octavio Romero, director de Pemex, y por lo tanto contra la petrolera nacional: el régimen de la Cuarta Transformación pisó “muchos callos” y ahora quienes perdieron sus privilegios quieren cobrar la factura.

Un primer paso, consideran por sus reacciones públicas, es evitar que Romero Oropeza continúe al frente de Pemex. Pero olvidan que las acciones en Pemex no son algo personal sino una definición política que comparten López Obrador, Sheinbaum y el actual director de la petrolera.

Rescatar a la principal Empresa Productiva del Estado, Petróleos Mexicanos, sin duda ha sido, como dijo el propio Octavio Romero, una hazaña. La petrolera se hallaba en su peor momento, lindando la bancarrota, operando con números rojos.

Su producción de crudo había caído a niveles alarmantes y la industria petroquímica, otrora orgullo nacional, prácticamente desmantelada. Pemex era la caja chica de los gobiernos del PRI y del PAN.

Cundían los jugosos negocios entre directivos y contratistas, proliferaban los privilegios, el derroche y una corrupción galopante que golpeaba severamente la salud financiera de la empresa, amén de otros perniciosos males, como la mafia sindical que gozaba de prebendas y recibía aparte su botín.

Todo eso cambió con López Obrador. Con Romero Oropeza se puso freno a los abusos, se combatió la corrupción y se cancelaron privilegios y dispendios. Se puso manos a la obra para recuperar la producción de crudo y rescatar las plantas petroquímicas, se adquirió otra en suelo texano y se construyó otra en territorio tabasqueño, que en el futuro permitirá recuperar la independencia energética.

Hoy, el panorama de Pemex es otro, distinto al de hace seis años.

Recientemente el presidente advirtió sobre “una campaña de mentiras” que desde hace tiempo sostienen sus adversarios y a quienes identificó como enemigos de la soberanía nacional.

Un dato importante es que Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) podrán integrarse a una secretaría de acuerdo a los planes de la doctora Sheinbaum, presumiblemente sería la de Energía. La idea de la reorganización está convenida con López Obrador para que se elimine el concepto de empresa “productiva” y pasen a ser empresas “públicas”.

Pero también puedo asegurarle que la relación de Claudia Sheinbaum con Octavio Romero está en su mejor momento. Juntos han trabajado el tema petrolero desde por lo menos el 2003.