Sin validez, los argumentos opositores contra Claudia Sheinbaum

El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ratificó lo que la mayoría de los mexicanos ya sabía

El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) confirmó lo que el pueblo de México sabía desde el dos de junio, menos la oposición, por su reiterada negación de la realidad: la doctora Claudia Sheinbuam ganó la elección presidencial de manera legal, legítima y contundente.

Ninguna de las evidencias presentadas por el PRIAN y la excandidata presidencial, Xóchitl Gálvez, fueron elementos de prueba convincente. El TEPJF las desechó por completo por tratarse de notas periodísticas que no probaban absolutamente ninguno de los argumentos esgrimidos en la impugnación.

"Las demandas tienen deficiencias evidentes tanto probatorias como argumentativas, se basaron exclusivamente en mil 480 vínculos electrónicos, se limitaron a notas periodísticas de redes sociales, fragmentos de publicaciones sin ser comprobados en alguna línea de otra naturaleza", señala el resolutivo.

Los magistrados Felipe de la Mata y Felipe Fuentes, ponentes del proyecto que desechó las quejas ofrecidas por la oposición y con las cuales pretendía anular la elección presidencial, aseguraron que no acreditaron que, efectivamente, hubo una campaña para favorecer a una fuerza política, esto es, a Morena y su candidata presidencial.

Era un despropósito solicitar la anulación de la elección presidencial cuando su candidata perdió por 30 puntos. Es decir, recibió una paliza en las urnas de poco más de 35 millones de mexicanos que dieron su respaldo a la doctora Claudia Sheinbaum, la primera mujer en la historia del país que asumirá la Presidencia de la República.

"Cuestionar la voluntad ciudadana con la exclusiva presentación de vínculos electrónicos no alcanza para acreditar los presuntos hechos", refiere la resolución.

La semana pasada, el TEPJF avaló el resultado de la elección presidencial sin anular ni un solo voto de los 35 millones 924 mil 519 votos que la presidenta electa recibió en las urnas. Los reclamos de que les robaron la elección y que repitieron hasta el cansancio cayeron por su propio peso.