La fuga de cerebros, gran pérdida nacional
"Todos los imperios del futuro van a ser imperios del conocimiento, y solamente serán exitosos los pueblos que entiendan cómo generar conocimientos y como protegerlos”
"Todos los imperios del futuro van a ser imperios del conocimiento, y solamente serán exitosos los pueblos que entiendan cómo generar conocimientos y como protegerlos”
Albert Einstein. Científico universal.
El 9 de agosto, una nota publicada en el diario La Jornada captó mi atención al tratar el tema de la fuga de cerebros desde México hacia otros países, especialmente a Estados Unidos. Este es un asunto que siempre me ha preocupado, ya que sabemos que información es poder.
Andrew Almazán, director de Investigación y Psicología del Centro de Atención al Talento (CEDAT) advertía en ese trabajo periodístico, que México está perdiendo a más de 50 por ciento de sus jóvenes superdotados.
Una encuesta realizada por el CEDAT reveló que la mayoría de los jóvenes en bachiller con mentes brillantes considera emigrar a otro país para continuar sus estudios. Almazán, con una formación en las universidades de Oxford, Yale y Harvard, subrayó: “En el CEDAT hemos detectado una acelerada fuga de cerebros; hoy, más jóvenes y niños talentosos abandonan el país.”
Según el Departamento de Estado de Estados Unidos, cada joven inteligente que emigra representa una pérdida promedio de 70 mil dólares, que es aproximadamente lo que se invierte en la educación y crianza de un niño desde su nacimiento hasta los 18 años.
De un millón de menores con inteligencia superior que deberían existir, se pierde el 95 % de ellos debido a la falta de detección y atención adecuada.
Desafortunadamente, la pérdida de cerebros se ha acelerado, y una de las causas es el pesimismo. “Hay jóvenes que físicamente están aquí, pero su mente ya está en otro país, son adolescentes de 15 años que ya se están preparando para irse al extranjero para estudiar una carrera o una maestría”, enfatizó el especialista. Es decir, estamos perdiendo alrededor de 150 mil mexicanos al año.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), estima que hay más de 500 mil profesionistas mexicanos en esta situación, mientras que el Banco Mundial calcula que alrededor de 400 mil profesionistas mexicanos residen en Estados Unidos.
Camelia Nicoleta Tigau, investigadora del Centro de Investigaciones sobre América del norte de la UNAM define: “el migrante altamente calificado sale de su país para elevar su calidad de vida, mientras que el indocumentado lo hace para sobrevivir económicamente. Para el primero se han establecido
acuerdos en el marco del tratado de libre comercio para América del norte con el ofrecimiento de visas a los migrantes altamente calificados, mientras que a los indocumentados ni siquiera existe un convenio para facilitar su cruce de frontera.”
Este fenómeno es una asignatura pendiente que debemos analizar para evitar que continúe perjudicando al país. Es crucial que el talento nacional se conserve y se aproveche para el desarrollo de México.
Ojalá el gobierno de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum y los gobiernos estatales pongan mayor énfasis en este grave problema para evitar que siga creando un déficit intelectual en nuestro país.
Nunca olvidar el pensamiento del extraordinario diplomático mexicano, Don Jaime Torres Bodet: “Si queremos educar a los niños de México para la libertad y democracia, debemos enseñarles, antes que nada, a ser verdaderamente libres y adquirir el arte de gobernarse a sí mismos. Eliminando los procesos de mecanización y de ciega obediencia.”
Es vital detectar y apoyar a nuestros niños y jóvenes talentosos, para que sepan que en su país tienen un futuro prometedor y crezcan con un profundo amor por México.