Escala Crítica

* T-MEC: Mil quinientos millones de dólares al día cruzan el Río Bravo.

* Canadá: gobernadores de derecha y reunión Justin Trudeau-Trump.

* México-EEUU, agenda: comercio, migración, fentanilo y seguridad. 

LA PRESIDENTA Claudia Sheinbaum decidió acertadamente dejar el "diálogo mediático" con Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos. Demasiado ruido y pocos avances, cualquier intervención se convierte en griterío. Peor aun cuando el interlocutor está acostumbrado al monólogo. Así.

Geografía es destino. Primero, vecinos rijosos: invasiones armadas con pérdida de territorio; después, vecinos distantes por corto circuito cultural (Alan Reading); desde 1994, vecinos estratégicos por horizonte comercial (TLC).

La Presidenta Claudia Sheinbaum y el secretario de Economía Marcelo Ebrard lo tienen claro: en temas de agenda bilateral con Estados Unidos debe existir colaboración, no subordinación. Este punto de partida es irrenunciable para México.

La relación bilateral viene con engaños mediáticos, estrategia recurrente de Donald Trump: antes de sentarse a negociar, trata de inclinar la balanza con amagos grandilocuentes y mezclas explosivas: funde lo político con lo económico y lo cultural. ¿Por qué anunciar algo y adelantarse en los tiempos? Para medir fuerzas e inducir en el otro una ´reacción apropiada´.   

Con perspicacia y principio de realidad, el gobierno de Sheinbaum debe planear. Sopesar pros y contras, antes que apanicarse y actuar con prisa. Sin temer la asimetría de poder y amagos que olvidan realidades económicas, la presidenta Claudia recordó en carta a Trump (26/11/2024): "Estoy convencida que la fortaleza económica de Norteamérica radica en mantener nuestra sociedad comercial, así podemos seguir siendo más competitivos frente a otros bloques económicos". La política no puede esquivar la realidad: mil quinientos millones de dólares cruzan diariamente la frontera entre México y Estados Unidos, en productos que generan mayor calidad de vida.

LOS ARANCELES DEL PUENTE

¿COMERCIO es destino? El anuncio de "aranceles del 25 por ciento a productos de México y Canadá, y 10 por ciento a China, el primer día de mi mandato", que realizó Donald Trump, presidente electo de EEUU, resulta un balazo en el pie por las repercusiones en el consumo. Fecha del ´arancelazo´: 20 de enero de 2025. Tal medida provocaría en la economía estadounidense una inflación estimada en 10%, por aumento de precios en productos de gran demanda. El Presidente en funciones, Joe Biden, advirtió: "espero que Trump lo reconsidere, creo que es algo contraproducente".        

Analistas de México y EEUU comentan que "hay que tomarse en serio las bravuconadas de Trump", por el gran poderío institucional con que asume su segundo mandato (2025-2028). Cierto que Trump viene recargado, pero no es menos cierto que hay que identificar sus estrategias –contradictorias- para así descifrar lo que quiere, más allá de los truenos y relámpagos mediáticos que suelta para congraciarse con el grueso de su base electoral, formada por trabajadores con bajo nivel de vida. Trump vende el nuevo sueño americano de proteccionismo, aislacionismo y supremacía blanca. De ahí sus ataques a migrantes y minorías raciales.                 

NORTE CON HOJA DE MAPLE

"ESTE ARANCEL permanecerá vigente hasta que las drogas, en particular el fentanilo, y todos los inmigrantes ilegales detengan esta invasión de nuestro país", lanzó Trump en la red X. El primero que mordió el anzuelo fue el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau. No fue por propia voluntad. Trudeau tomó en cuenta el contexto político: tres gobernadores de provincias canadienses se pronunciaron por "revisar el T-MEC y excluir a México". La vena ideológica de derecha no se anda por las ramas. Nos ven como país de otra categoría. Error de perspectiva económica, pues México tiene el mayor intercambio comercial con EEUU. Trudeau viajó para entrevistarse con Trump, sin protocolos públicos para la visita. Este lance puede beneficiar a EEUU si Canadá se va por la libre y negocia sin tomar en cuenta la trilateralidad del T-MEC. Escenario que quizás gusta a Trump, tan dado al mano a mano, mientras llega la revisión del Tratado en junio de 2025, curiosamente fechas de la primera elección judicial en México. Agenda cargada.

De cualquier modo, Canadá se notó débil con esa visita de Trudeau a Trump. Los nervios y las prisas no son buenos diplomáticos. Tampoco creer en todo lo que se anuncia. Tampoco es prudente la negociación tras bambalinas. Todo movimiento, antes de la toma de posesión de Trump, es futurismo en el vacío. Hay que ver sus cartas ya en el cargo, no adivinar qué trae en la mano.      

PASO A PASO

MÉXICO tiene cuatro asignaciones, según Trump: comercio, migración, fentanilo y seguridad (combate al crimen organizado). ¿Cómo atender esa agenda? La Presidenta Sheinbaum fue inteligente en su carta a Trump, al citar logros de México en los rubros más delicados: fentanilo (confiscaciones importantes) y migración (75% de disminución). Hay otros avances que se suman. La operación Enjambre, de ejecución reciente en Edomex y Guanajuato, apunta a cortar vínculos de autoridades con el crimen organizado. Sin decirlo, Sheinbaum actúa y con ello prepara la defensa de los intereses mexicanos ante EEUU y Canadá.

La geopolítica de EEUU, finalmente, apunta a China como el enemigo mayor a futuro. En esta historia, México aparece como aliado natural por cercanía geográfica. Aunque si Trump estira de más la cuerda, México y su diversificación de socios comerciales tendrá que ser camino estratégico a considerar. La soberanía no es negociable. Hay legitimidad. 

(vmsamano@hotmail.com)