Riesgos en el Maratón Guadalupe-Reyes

El Guadalupe-Reyes es un maratón festivo que inicia el 12 de diciembre con el Día de la Virgen de Guadalupe, una celebración que incluye peregrinaciones y rezos.

El Guadalupe-Reyes es un maratón festivo que inicia el 12 de diciembre con el Día de la Virgen de Guadalupe, una celebración que incluye peregrinaciones y rezos. Del 16 al 24 de diciembre las Posadas, que recrean el peregrinaje de José y María; con cánticos, comidas, bebidas, regalos y piñatas. La Nochebuena del 24 de diciembre, momento clave para reuniones familiares y cenas tradicionales, mientras que la Navidad del día 25 resulta más apacible. Pero las bacanales se avivan con la Noche Vieja y Año Nuevo, cerrando con los últimos bríos, y centavos, la noche y madrugada del Día de Reyes. No obstante, estas festividades arraigadas tendrían efectos dañinos para la salud, y la economía personal y comunitaria. Según la Secretaría de Salud, el consumo excesivo de alcohol puede provocar intoxicaciones, deshidratación, gastritis, úlceras, cirrosis, hipertensión, cardiopatías, accidentes cerebrovasculares, cáncer, depresión, ansiedad, violencia, adicción y dependencia. Por otro lado, el consumo de alimentos ricos en grasas, azúcares y sal puede causar sobrepeso, obesidad, diabetes, colesterol y triglicéridos altos, hipertensión, infartos, insuficiencia renal, cálculos biliares, osteoporosis y cáncer. Con el alcohol y la comida en exceso, podríamos ganar entre 3 y 7 kg durante esta temporada maratónica.

De acuerdo con el INEGI y el INSP, nuestras principales causas de mortalidad son las enfermedades del corazón, la diabetes y las enfermedades del hígado. Padecimientos relacionados directamente con la mala alimentación, el alcohol y el sedentarismo. Aunado a que el 75% de la población adulta tiene sobrepeso u obesidad, las probabilidades y riesgos de detonar o agravar los síntomas de éstas y otras enfermedades, aumentan. Estos males representan una carga para la economía familiar, el sistema de salud y una disminución en la calidad de vida. Asimismo, el maratón generaría un impacto nocivo en la economía individual y familiar, al gastar demás, endeudarse, faltar o perder el empleo, generar conflictos familiares y legales, lastimar a otros o dañar el patrimonio. Según la CONDUSEF, más del 40% de los mexicanos gasta más de lo que gana en estas fechas, y cerca del 70% no tiene un presupuesto destinado. Nos endeudamos debido al furor navideño, a la falsa idea de que el aguinaldo alcanza para todo, que pagaremos la deuda sin demora o fácilmente a meses sin intereses. Muchas familias gastan hasta más del 150% de sus ingresos adquiriendo deuda, empeñando o rematando pertenencias; una carga para la cuesta de enero y varios meses más.

Por otra parte, en estas fechas aumenta el riesgo de sufrir o provocar accidentes de tránsito, al conducir bajo los efectos del alcohol o la fatiga, viajar de noche, por carreteras inseguras o con mal clima. Según el INEGI, conducir bajo el efecto del alcohol o las drogas, es la segunda causa de accidente, siendo la primera el exceso de velocidad. Cada año se registran en promedio, cerca de 20 mil accidentes de tránsito en zonas urbanas y suburbanas durante este periodo; es la temporada con mayor incidencia, causando hasta 4 mil muertes y unas 3 mil lesiones, entre temporales y permanentes. Durante todo el año, la mayor frecuencia de accidentes son en fin de semana, 1 de cada 4, entre las 6 pm y medianoche; pero durante el Maratón Guadalupe-Reyes, las probabilidades y riesgos parecen invariantes, igualmente altos en cualquier día y hora. Y los jóvenes, tristemente, son las víctimas más frecuentes; de 25 a 30 años el mayor número, seguido de 18 a 24. Por ello, moderemos el consumo de alcohol y alimentos dañinos, evitemos en lo posible las aglomeraciones y respetemos las medidas básicas de salud y convivencia; no gastemos más de lo necesario ni provoquemos una bola de nieve convertida en avalancha al contraer una deuda. Evitemos conducir bajo los efectos del alcohol o la fatiga, y priorizar el buen estado de nuestros vehículos. Solo así  podremos disfrutar sin poner en riesgo la salud, la economía y el bienestar propios y ajenos.