Por qué fracasan los países
¿Se puede escribir sobre un libro que se quiere leer, pero no se ha leído?
¿POR QUÉ LEEMOS? ¿Por qué no leemos? ¿Por qué hago estas peguntas? Y ¿esta tercera por qué la hago? Todo, en relación a que voy a leer un libro que me interesa y del que puedo platicar después. Y la pregunta puede ser: ¿Se puede escribir sobre un libro que se quiere leer, pero no se ha leído? El libro se llama "Por qué fracasan los países".
SIEMPRE ME HA LLAMADO poderosamente la atención saber quién gana cada octubre los premios Nobel. Principalmente el de Literatura, porque este campo de imaginación y palabras es uno de mis intereses. Pero también quién o quiénes ganan el Premio de la Paz, porque, como se podrán imaginar, la paz y tranquilidad son también de mi interés.
Y AUNQUE CASI NO LES ENTIENDO cuando leo por qué ganaron los premios de Química, Medicina, Física y Economía, también me asomo a ellos, para intentar ver por dónde anda el mundo del conocimiento en esos temas. Que también son de mi interés, aunque menos. Imaginen si no mi interesa mi salud, los elementos químicos que me hacen físicamente ser lo que soy, y lo que pueden o no llevar mis bolsillos, para cubrir mis necesidades, gustos y aficiones.
HACE COMO TRES AÑOS leí por qué había ganado el premio Nobel de Física un científico: lo ganó porque afirmó y demostró que se puede sacar la fórmula matemática del vuelo de pájaros, pero no de 10, 1000, sino de cientos de miles. Esos que vemos por el aire haciendo acrobacias y piruetas de manera coordinada, sin chocarse entre ellos. ¡Claro que me llamó la atención!
AHORA ME HA LLAMADO LA ATENCIÓN -reitero, aparte del de Literatura que ganó la coreana Han Kang, autora de las novelas La clase de griego (ya leído) y La vegetariana- que los ganadores del premio de Economía son Daron Acemolgu y James Robinson. Y el libro que han publicado ambos, a cuatro manos, es "Por qué fracasan los países". Y la hipótesis que plantean, es que fracasan porque quienes manejan, desde el gobierno, sus instituciones, lo hacen de manera desordenada, descoordinadas, patrimonialista en muchos casos, pero sobre todo en beneficio de sus élites.
PERO DECÍA QUE EL LIBRO no lo he leído. Solo me asomé a las palabras de elogio que le prodigan algunos de sus pares, anteriores premios Nobel. Y en el primer capítulo (Tan cerca y sin embargo tan diferentes) cuentan el ejemplo de dos ciudades hermanas, que llevan el mismo nombre: Nogales, cuya población es del mismo origen, su cultura es la misma, solo que los divide la frontera entre México y Estados Unidos. Y una de ellas es rica y la otra pobre. Una pertenece a Sonora, México, y la otra a Arizona, Estados Unidos. Las divide no solo una malla ciclónica, sino una manera contraria del manejo del poder.
EL EJEMPLO ME LLAMA PODEROSAMENTE la atención porque lo conozco con referencia a dos ciudades fronterizas del norte, Matamoros-Brownsville, porque nací y crecí en la ciudad mexicana, y conozco la estadounidense. Es decir, nadie me lo cuenta. Mientras en Matamoros hay baches, polvo, lodo, se maneja pasándose los altos, la obra pública es de mala calidad, tirando basura por todos lados, en Brownsville es todo lo contrario, para mejor.
CADA UNO PODEMOS DAR EXPLICACIONES a manera de opinión de por qué las dos realidades son distintas. Y quienes cruzamos de uno a otro lado lo verificamos y nos quedamos admirados. Y podemos decir que la corrupción, que la violencia, que la frontera, de uno y otro lado, (tan lejos De Dios y tan cerca de los EEUU) la habitan dos vecinos distantes. Lo real es que quienes las dirigen son ejemplo de dos visiones distintas: una la de la ley y el orden, castigo a quien viola las leyes, y la otra con la miopía intelectual de que quien no tranza no avanza. Claro, hay más, pero por lo pronto puedo decir eso.
¿PODEMOS DECIR DE MANERA SINTÉTICA: ciudad pobre y ciudad rica? Puede ser. Solo que la misma persona puede pasar días en una ciudad y otros días pasarse a la otra; y su comportamiento cambia, algunos más y algunos menos. Y los arraigados modos de ser personales se ven movidos al estar en uno y en otro lugar. La percepción de seguridad, sí es distinta. Yo recuerdo, por ejemplo, ver en los patios sin cerca de las casas de Brownsville, las bicicletas allí, como si nada, la máquina de cortar césped lo mismo. Y sin peligro de que la roben. En cambio en Matamoros eso sería de insensatos.
NO, NO SE TRATA DE ELOGIAR una y menospreciar la otra, de dos ciudades vecinas divididas por la frontera. Sino de analizar y reflexionar cuáles son las causas que determinan el presente y futuro de ambas, para que sean tan distintas en perjuicio o bienestar de sus habitantes. A eso me refiero cuando digo que no he leído el libro. Cuando lo lea elaboraré la reseña correspondiente. Diría mi madre "Dios mediante". Y de niño le preguntaba a mi madre de por qué decía eso. Y su respuesta: la vida no la tenemos comprada, y no sabemos si estaremos mañana.
PD. PARCHE. Sé que los sabios dirán que es claro, que los países fracasan porque los ricos explotan a los países pobres, que el capital hace lo propio con la clase obrera, que la plusvalía, que el valor de uso y de cambio, etc. Y es verdad. También tienen razón, si no, no serían sabios.