Los partidos llamarán al "voto útil" conforme se cierren los tiempos de la competencia

• Espectaculares: MC y su deslinde en Tabasco, pero no en Jalisco
• Un partido menor en alianza es el que más pierde con voto útil
• Cultura y educación, como grandes pendientes de campaña en gobierno

Víctor M. Sámano Labastida

AYER de manera sorpresiva apareció un anuncio espectacular en Villahermosa en el que, sobre un fondo negro, se observan las imágenes de Minés de la Fuente (María Inés) y Xóchitl Gálvez, sugiriendo que votar por ellas dos significa ejercer un "voto útil". Una es candidata del Movimiento Ciudadano a la gubernatura de Tabasco y otra abanderada de la coalición PRI-PAN y PRD por la Presidencia. De inmediato el dirigente estatal del MC, Pedro Palomeque, deslindó a su partido de tal acción y pidió a las autoridades proceder a investigar y sancionar a los autores.

Como se sabe, no hay alianza ni candidatura alguna entre MC y otros partidos. El partido de Dante Delgado va solo a la contienda nacional y estatal. 

Puede resultar casual el hecho, pero curiosamente hay un antecedente cercano. La mañana del lunes 22 quienes buscan la Presidencia acudieron a firmar el "pacto por la primera infancia" (Cdmx), y Xóchitl Gálvez estuvo a punto de firmar en el espacio correspondiente a Movimiento Ciudadano. Le advirtieron a tiempo del error, pero éste fue utilizado por MC para hacer campaña en el sentido de que hasta Xóchitl sabe por quién votar, esto en referencia a Jorge Álvarez Maynez, el aspirante emecista que va en tercer lugar de las encuestas.

Pero hay más. "El extraño caso del voto útil", tituló El País una nota de su corresponsal Elías Camajhi (12/04/2624), en donde informa sobre la campaña promovida por Salvador Cossío de la Agrupación Confío  quien en Jalisco pagó espectaculares, calcomanías y folletos, para llamar al voto cruzado para MC y la alianza tripartita de Gálvez. Con los respectivos logos del PAN y del partido naranja. En ese caso por Pablo Lemus, candidato a gobernador por el MC y por Xóchitl del PAN. 

CADA CUAL SU CIRCUNSTANCIA

EN JALISCO, vale decir, ni el PAN ni MC han protestado. Cabe señalar que en aquel estado, la encuesta de encuestas le reconoce a Pablo Lemus el 47% de la intención del voto, contra 39 de la morenista Claudia Delgadillo y sólo 12% de la panista Laura Haro. De ahí que Cossío (notario metido a la política y que ha pasado por el PRI, PRD, MC y Morena, luego PVEM), impulse el "voto útil".

En Tabasco las cosas son distintas en la lucha por la gubernatura tanto para MC como para la alianza PRI-PAN, y en donde el PRD también va por su cuenta. Las tendencias conocidas favorecen a Javier May, de Morena, y quizá eso lleve –en otro momento- a que los opositores promuevan el llamado voto útil en favor de alguno de ellos.

Como se sabe, el voto útil es la convocatoria que hace alguno de los partidos, candidatos o sus simpatizantes para unir fuerzas en torno a quien suponen más posibilidades de competir. Generalmente lo hace la oposición.

El problema para los partidos de menor presencia es que terminan sacrificados en la votación general. Veremos quién se anima por la opción del sacrificio en circunstancias en que algunos pelean su sobrevivencia.

UNA DE CAL POR CIEN DE ARENA

¿INTERESA LA CULTURA a los partidos, a los candidatos, al gobierno? Tema para investigación ciudadana: identificar menciones a cultura y educación en los llamados sexenios neoliberales. Aproximaciones y reintegros: con Enrique Peña Nieto (2012-2018) se llegó al nivel microscopio, con una sola mención sobre cultura y educación por cada informe. Seguimiento de la Universidad Iberoamericana. 

En el sexenio de Felipe Calderón (2007-2012), las menciones en los informes de gobierno fueron 3 en promedio, con un total de 200 párrafos de desigual tamaño por cada informe. Seguimiento de la facultad de Ciencias Políticas de la UNAM.

En el sexenio de Vicente Fox (2001-2006), las menciones fueron 5 enpromedio, con un total aproximado de 230 párrafos (de igual tamaño) por cada informe. Seguimiento de la Universidad de Guadalajara.

Punto en común, de pedigrí neoliberal: ni el PAN ni el PRI en su nueva versión se interesaron por la cultura y la educación en sentido temático. Y lo malo no es eso, sino que en el olvido de las palabras cultura y educación se refleja un profundo desinterés por acciones gubernamentales en esoscampos.            

En otros tiempos, cultura y educación eran bienes preciados para la comunidad y los gobernantes valoraban ese pulso social. Los actores políticos estructuraban propuestas que, desde la educación y la cultura como fundamentos, respaldaban proyectos civilizatorios de gobierno. En el siglo XIX europeo, la cultura era parte fundamental de las plataformas políticas: trátese de la república francesa y sus afanes de igualdad de oportunidades para sus ciudadanos, la Alemania imperial que consolidó la excelencia filosófica, o el Reino Unido (Inglaterra) que con medidas prácticas desarrolló un liberalismo poco aristocrático, que luego implementó Estados Unidos. 

México no fue inmune a propuestas culturales y educativas desde el gobierno. Lo hicieron por primera vez los liberales de la Reforma (1856-1872), con un discurso nacionalista y un desarrollo considerable de medios periodísticos. Incluso algo se fraguó en tiempos de Don Porfirio, con la generación de "Los Científicos" que hizo su esfuerzo cultural dentro del cascarón de la dictadura. En tiempos posrevolucionarios, sobresale José Vasconcelos en la SEP por querer hacer del desarrollo cultural y educativo un catalizador político.

En el sexenio actual, las palabras ´cultura´ y ´educación´ aparecen confrecuencia pero algo hace falta.  (vmsamano@hotmail.com.)