La maravilla del cuerpo y sus funciones (II)

ENTONCES LA MARAVILLA de las funciones del cuerpo, uno lo extrapola o expande en ondas expansivas para recordar que vivimos en un planeta que gira alrededor de una estrella, en lo que la ciencia le nombró sistema solar, y que cada planeta de los que giran alrededor del sol no tienen a dónde caerse, y que cumplen dentro del mecanismo estelar con sus órbitas de una manera exacta. Sí, la maravilla de nuestra existencia, y la maravilla del pensamiento y la especulación. Pero además la maravilla de que ese pequeño sistema solar (imaginemos las maquetas que nos piden en la primaria y secundaria de la célula humana y del sistema solar) forma parte de una galaxia y que hay millones de galaxias. Ufff. Hasta allí llega mi pensamiento.

ESTE FUGAZ Y EFÍMERO de nombre Antonio, hoy se despertó consciente de que aún vive (la vida es una maravilla), inmediatamente preparó café para una hija que a esta hora de las seis sale para su trabajo, y se dijo: así voy a empezar el texto de hoy, como decir sobre la maravilla del olor del café recién hecho, lo que representa para quienes somos cafeinómanos. Y si eso es la maravilla, imagine usted lo que sentí al asomarme a ver el amanecer naranja de hoy, luego de una tarde y noche lluviosa en abundancia, y ver revolotear a un colibrí madrugador entre las flores de fuera de mi casa. Pero además la coincidencia de que antier escribí el texto al que puse por título "El colibrí y la gota de agua", fábula para motivarnos en nuestro esfuerzo al parecer pequeño de contribuir a la mejora de nuestro entorno. (Paréntesis para salir a caminar)

Y ESTE FUGAZ Y EFÍMERO salió a caminar y acaba de regresar. Cuarenta minutos. Y al final unos cien metros de trotar lentamente a la velocidad de una persona de 62 años. El sudor se hizo presente desde la mitad del trayecto. Cincuenta y cinco saludos correspondidos de personas que van al trabajo o a la escuela; entre ellos ocho muy forzados en la respuesta del buenos días,  con la mirada adusta como diciendo y ora este". Cinco no respondidos, quienes quizá no me escucharon.

EL CASO ES QUE es una maravilla el funcionamiento de nuestro cuerpo. Lo ideal es hacer deporte. El médico me recomienda caminar una media hora cuando menos. Y alimentarme saludable. Cuando me he puesto grave por descuido en los malos hábitos, me prohíbe embotellados, pan y grasas, de esas que vienen en los chicharrones y en las sabrosas carnitas de surtido y en el mondongo (pancita o menudo). Y uno tiene que hacer caso o atenerse a las consecuencias. Como cuando decimos: "de algo nos vamos a morir," o "vida, ái te quedas". ¿Unos taquitos? "Ocho con todo" (FIN)