Sobre arena

Carmelo Domínguez es un saxofonista jalpaneco originario del poblado Iquinuapa. A los ocho años de edad, aprendió solfeo y se instruyó en la música con la dirección de su padre Félix Domínguez Torres.

Nació un 10 de mayo de 1961, pero una década después ya era músico en las agrupaciones "Los Reos" y "Los Pacíficos", de Emiliano Zapata, un municipio ribereño.

Sin embargo, de 19 años, le llegó una oportunidad para destacar en la Unión Americana. Dado su talento, se hizo integrante del grupo "Carlos Ayala y su Pandilla". Era la década de los ochenta, y en un periodo de dos años, se presentó en varias ciudades texanas, como McAllen y Houston, así como en Los Ángeles, California.

Sin embargo, retornó a Tabasco. La estancia en su tierra duró poco porque recibió una llamada para sumarse a "Los 7 Modernistas", experiencia vital que solo duró tres años en esta agrupación de amplia trayectoria.

Con la popularidad de ser un gran saxofonista tabasqueño, en el ámbito nacional e internacional, Domínguez regresó al trópico. A finales de la década de los ochenta, pasó a ser parte de "Karmito y Los Supremos" justo cuando en la radio se escuchaba el hit musical "El Mango Manila", y estaba en la cúspide el duelo musical entre "El Brujo del Trópico" y "Chico Ché y La Crisis".

En esta etapa, donde conoció la "generosidad" de Karmito y el talento de su paisano Goyito Madrigal, desarrolló otras habilidades, como el de hacer arreglos a piezas musicales, arreglos que seguiría realizando en los siguientes años.

Con el inicio de los noventa y cuando se creía que la carrera de Carmelo Domínguez concluiría en Tabasco, "Los Flamers" mostraron un interés por él. Con la agrupación veracruzana grabó cuatro discos, entre ellos, "Flamazo Navideño" y "Gran Reventón", producciones que se escucharon en otras ciudades americanas, entre ellas, Denver y Washington; precisamente en estas plazas, se presentó con éxito el saxofonista tabasqueño.

Conocido como "El faraón del sureste", y luego de giras internacionales, decidió volver para quedarse en su natal Jalpa de Méndez. Fundó, junto con otros colegas, el grupo "Carmelo Domínguez y su Grupo Caleu", a la par de impartir clases de música en el nivel Primaria y el de formar a nuevas generaciones de músicos. Con Grupo Caleu inició una etapa de grabaciones en los estudios de "Los Flamers" y con el apoyo de "Junior Klan", pero a la fecha suman 30 discos grabados en los que él ha participado como arreglista, cantante, saxofonista y flautista (de carrizo).

El público lo recuerda por sus presentaciones en los programas de televisión, "Siempre en Domingo", y en CORAT (hoy TVT); en las entrevistas en secciones de espectáculos y porque su nombre es un referente entre los gremios de artistas y músicos.

Con 63 años, continúa viajando por todo el sureste mexicano, donde lleva la música de "Carmelo Domínguez y su grupo Caleu", como aquel tema que impulsó y fue un éxito, "Te lavaste la cara y el mono no" (de Benjamín Villanueva), que también grabaron las Bandas Macho y Maguey.

Aunque aprendió a tocar el clarinete y otros "metales", pues ejecuta barítono, soprano y el sax alto, Carmelo encontró un gusto especial por el saxofón tenor, el cual lleva a todos los escenarios. En la actualidad sigue activo y ya prepara un nuevo disco.

@Librodemar