La Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM) ha dispuesto un operativo para garantizar el orden y la seguridad de los asistentes que se reunirán este sábado en el estadio Nemesio Diez, donde Toluca y América se enfrentarán en un partido de alta expectación.
Este despliegue contempla medidas estrictas para mantener el ambiente controlado dentro y fuera del recinto, respondiendo a la alta afluencia, ya que todos los boletos fueron vendidos.
El operativo estará integrado por 832 elementos de seguridad distribuidos en puntos estratégicos alrededor del estadio. Además de los agentes a pie, se contará con un contingente de ocho binomios caninos especializados y diez equinos que contribuirán a tareas de vigilancia y contención.
Estos equipos, según informó la SSEM, tienen la misión de anticiparse a situaciones de riesgo y prevenir conflictos entre los asistentes, especialmente en el acceso al estadio y áreas de mayor concentración de personas.
Control y monitoreo en tiempo real
- El despliegue también incluirá el monitoreo constante a través del Centro de Control, Comando, Comunicación, Cómputo y Calidad (C5), que permitirá a las autoridades mantener una supervisión detallada de cada punto crítico del estadio.
Las cámaras de infraestructura estatal estarán activas durante todo el evento, con el objetivo de detectar cualquier actividad sospechosa o alteración al orden.
- La presencia de 65 patrullas, ocho camiones y seis motocicletas reforzará la movilidad de los oficiales a lo largo del operativo, comenzando a las 16:00 horas, con cierres viales sobre la avenida José María Morelos. Esta medida busca facilitar el control del flujo vehicular y dar prioridad a la seguridad de los peatones en la zona.
Revisión Exhaustiva en los Accesos
- Para reforzar las medidas preventivas, la SSEM trabajará en conjunto con el personal de seguridad privada del estadio, estableciendo filtros de revisión donde se inspeccionará a los asistentes. Este protocolo tiene como propósito evitar el ingreso de drogas, armas, pirotecnia u objetos peligrosos que pudieran alterar el orden o poner en riesgo a los aficionados.