De acuerdo a pescadores de la zona, esta especie no es común verla cerca de la playa pues se tratan de peces de profundidad, por lo que creen que alguna marea los sacó a flote y al entrar en despresurización pudieron llegar a la orilla y morir.

«Cuando me desperté todavía estaban vivos. Eran cientos los que quedaron aquí en la playa», explicó Roberto, el velador de unos de los bares ubicados en la playa. El fenómeno sorprendió a los locales y turistas que llegaron a la playa, pues no daban crédito el hecho de que tantos peces quedarán muertos a la orilla del mar.

Horas después personal de la Dirección de Ecología de Puerto Vallarta acudió al lugar para levantar varias especias ejemplares para poder analizarlos, pues existen varias hipótesis de este hecho, mismas que van desde la marea roja, corrientes submarinos que los arrojaron a la orilla o incluso contaminación. Se trata de peces conocidos como sable o cinta; son residentes en la región. Su distribución es mundial, es posible encontrarlos desde los dos hasta casi 400 metros de profundidad, aunque generalmente se encuentran entre 100 y 200.