El Tren Maya con el sello de López Obrador
Terminada de construir la gran refinería Olmeca en Paraíso, Tabasco –actualmente en periodo de pruebas-
Terminada de construir la gran refinería Olmeca en Paraíso, Tabasco –actualmente en periodo de pruebas-, la siguiente mega obra de infraestructura que el presidente Andrés Manuel López Obrador inaugurará en el sureste es el Tren Maya, previsto para finales de 2023.
Es, sin duda, una de los proyectos más ambiciosos para el desarrollo de la región y también que será el sello del gobierno de López Obrador. Será una gran herencia que dejará a los estados tradicionalmente olvidados en el proyecto nacional. Hay, por supuesto, quienes no sólo están en contra de esta ambiciosa obra de desarrollo sino que apuestan a que no será terminada.
Pero, si a la refinería de Pemex en Paraíso la nombró "Olmeca", ahora se puede entender por qué desde antes de que tomara posesión como presidente, AMLO anunció que esta nueva ruta de ferrocarriles llevaría el simbólico nombre de Tren Maya. En la perspectiva de un político vinculado a la cultura del sureste Olmeca y Maya son inseparables.
En la edición de ayer de Diario Presente, en su serie de especiales "Hechos e Ideas", nos ofreció un trabajo periodístico completo sobre lo que para el presidente López Obrador es una herramienta fundamental para darle más dinamismo a la economía y a la relación entre los pueblos del sureste.
Recordemos que en Noviembre de 2018 AMLO convocó a una consulta pública para que la gente expresara su opinión sobre el Tren Maya y otras importantes decisiones en materia de infraestructura y acciones de su gobierno entre las que se contaron la nueva refinería, la plantación de un millón de árboles (sembrando vida), aumento al doble de la pensión de adultos mayores y becas para estudiantes.
La propuesta del Tren Maya obtuvo una abrumadora simpatía. Había dicho López Obrador poco antes de asumir la presidencia en sus planes estaba un "tren moderno, turístico y cultural", para integrar a los principales centros arqueológicos de la cultura maya en cinco estados del sureste mexicano: Tabasco, cuna de la cuktura Olmeca, Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
Dijo en aquellos días que "es una obra muy importante porque se va a comunicar una de las regiones de más importancia cultural en el mundo. No hay en otras partes del mundo una región con tanta riqueza cultural como esta región de florecimiento de la gran cultura maya". Es tan valioso el Tren Maya para el presidente López Obrador que sacrificó a un secretario de gabinete, Javier May titular de la Secretaría de Bienestar, para encargarle una obra que a Rogelio Jiménez Pons se le había atorado.
No sólo varios son los intentos de crear una ruta maya, un corredor turístico cultural, sino que también en la conceptualización de López Obrador ha estado recuperar para México lo que fue uno de los transportes más baratos, el ferrocarril, y que a principios del siglo pasado permitió comunicar y transportar personas y mercancías a casi todo el país.
Una de las obsesiones del presidente tabasqueño es desde sus anteriores campañas buscar mecanismos para romper el aislamiento y el rezago del sur-sureste, estados con una gran riqueza cultural y de recursos naturales, pero con los ingresos más bajos de todas las regiones del país.
Se discute si el Ten Maya será una obra más importante para AMLO que la refinería, o el corredor transístmico que comunicará a Salina Cruz Oaxaca, con Coatzcoalcos, Veracruz, pero como han explicado quienes siguen de cerca los proyectos del mandatario mexicano todas estas obras –así como programas como Sembrando Vida o Construyendo Futuro- parten de una idea integradora del desarrollo.
Como sea, el Ten Maya pasará a la historia como una de las apuestas más ambiciosas de López Obrador para tener un México con menos marginación en sus regiones.
PARADA ESPECIAL
Ayer el director Pemex, Octavio Romero, acudió ante los diputados federales para la glosa del informe presidencial. Destacó que la empresa se ha endeudado, y al contrario viene pagando en tiempo y forma a los proveedores, un hecho sin precedentes dijo. Remarcó, entre otros temas, que Pemex se convirtió en el mayor contribuyente del país, entregando más de 439 mil millones de pesos por concepto de contribuciones directas al gobierno federal en el periodo de enero a septiembre de este año. También habló del aumento en extracción de crudo y que se prevé cerrar el año con un millón 800 mil barriles diarios de petróleo. Pemex tiene 36 nuevos campos (21 marinos y 15 terrestres).