ESCALA CRÍTICA
Cambios en el gabinete de López Obrador; el juego de las presiones y los trascendidos
*Fallida la versión que daba sitio a Velasco; llegó Toledo Manzur
*El tema ambiental, uno de los más complejos en la Cuarta
*Evaristo Hernández y AMLO: una rectificación del mandato
SORPRESIVA fue la designación de Víctor Manuel Toledo Manzur, doctor en Ciencias por la UNAM, como nuevo titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), tras la renuncia obligada de Josefa González. Y lo es porque este investigador prestigiado, poeta y colaborador en publicaciones ha criticado algunas de las decisiones del presidente López Obrador y de sus funcionarios. Si aún continúa en el cargo estaríamos ante un cambio interesante e importante en la política nacional.
Le comento esto porque además, tan pronto se supo de la remoción de González Blanco, de inmediato comenzó a difundirse la versión -iniciada por el periodista Joaquín López Dóriga-, de que quien asumiría la titularidad de Semarnat sería el controvertido ex gobernador Manuel Velasco Coello, uno de los jefes del Partido Verde. Fue un trascendido con jiribilla.
PARQUE PARA LOS CRÍTICOS
EN EFECTO. La reacción no se hizo esperar. Los críticos de AMLO aprovecharon la ocasión para descalificar una designación aún no realizada; en tanto, algunos simpatizantes de Morena también usaron las tribunas virtuales para expresar su desencanto…de algo que no sucedió. ¿Esa fue la intención del trascendido?, hay obradoristas que opinan en ese sentido. “Rumor sin sustento” el que promovía al ex mandatario, destacó la revista electrónica Polemón, fundada por el fallecido Jaime Avilés.
Velasco Coello es, sin duda, un personaje que ha logrado establecer importantes redes de poder; pero su excesivo protagonismo lo llevó a colocar a los legisladores de Morena en una situación incómoda en septiembre de 2018: tuvieron que aprobarle una licencia como senador…para que pudiera volver a ocupar el cargo de gobernador al que había renunciado. Un costo muy alto para una bancada y un movimiento que debe cuidar la confianza ciudadana. Para una nueva manera de hacer política.
Por alguna razón, aunque entre los planes de Velasco Coello estaba asumir la senaduría en enero pasado, se mantiene en la banca y en la Cámara Alta sigue despachando su suplente Eduardo Murat Hinojosa, hijo del exgobernador José Murat Casab y hermano del actual gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa. ¿Un candado?
El caso, le decía es que finalmente fue designado en la Semarnat un científico egresado de la UNAM, el biólogo y ambientalista Toledo Manzur, de quien AMLO dijo que “es una gente íntegra, un profesional, una gente honesta”.
Dio una explicación adicional que anuncia algunos enroques en su gabinete: “En cuanto a que si se produce un desequilibrio porque eran ocho mujeres, (y) ocho hombres, ya lo vamos a resolver; porque a lo mejor va a haber otros cambios y ahí ya se equilibra. Se optó por Víctor Manuel Toledo porque es uno de los mejores científicos sociales de México, uno de los mejores ecologistas, ambientalistas de este país, de los más estudiosos, el más vinculado con los problemas ambientales, el más propositivo o de los más propositivos, honesto. Es una eminencia”. Toledo Manzur no será un funcionario cómodo; los asuntos ambientales son los más complejos para el régimen de AMLO y los proyectos de crecimiento.
CAMBIO DE PLANES
HAY DOS hechos innegables: el edificio del Ayuntamiento de Centro (Villahermosa) registra un grave deterioro por falta de mantenimiento, lo mismo que el servicio del agua entubada. A partir de esos datos innegables el alcalde Evaristo Hernández decidió dos medidas que entraron en contradicción con uno de los principios fundamentales de la Cuarta Transformación expresados por Andrés Manuel López Obrador: se acabaron las privatizaciones de los bienes y servicios públicos.
Ayer, el edil –que llegó al gobierno bajo la insignia de Morena y cobijado por AMLO-, rectificó: “Nosotros no vamos a hacer algo donde el Presidente de la República no esté de acuerdo”. Para que no quedara duda –a pesar de que insistió en la conveniencia de trasladar la sede del Ayuntamiento a la denominada Ciudad Esmeralda-, Hernández Cruz enfatizó durante una entrevista en Telerreportaje: “derivado de lo que el presidente AMLO dijo sobre este tema, y también por sugerencia del gobernador del Estado. Esa ya no es opción. Ni venta del terreno ni privatización de los servicios”. Una especie de rectificación de mandato.
Hasta donde se sabe, y lo confirmó Hernández Cruz, dos despachos de ingenieros estructuralistas realizan un nuevo estudio para determinar qué se puede hacer con el actual edificio ubicado en Tabasco 2000 –y cuyo predio era hasta el año pasado propiedad del Invitab-, si remodelarlo o construir otro. Por lo pronto, el terreno ya no se puede vender.
Un asunto que también requerirá de una revisión a fondo es el rescate del sistema de agua potable en la cabecera municipal y en la demarcación de Centro. Calcula el ayuntamiento que para el entubado de agua, su procesamiento y el drenaje, se requieren por lo menos unos 12 mil millones de pesos. Evaristo Hernández sostiene su propuesta para incrementar la tarifa del vital líquido. Este última cuestión, aunque necesaria, tendrá que enfrentarse a la predisposición negativa generada por las dos iniciativas desechadas: el edificio y la concesión privada.
Recuerdo que en la campaña del 2015, cuando Hernández Cruz buscó ser alcalde por la coalición encabezada por el PRI explicaba que entre las cuestiones que había aprendido en su carrera política era no enfrentarse al gobernante estatal en turno. En este caso la apuesta era mucho más arriesgada: había que evitar el choque con el Presidente. (vmsamano@hotmail.com)