Altar Mayor
El Presidente, por los 400...
Habrá quienes no estén de acuerdo con el sui generis estilo de gobernar del Presidente Andrés Manuel López Obrador y sus razones o asegunes, tendrán.
Pero sin embargo, déjeme decirle amable lector que, a final de cuentas, cuando faltan pocos meses para que concluya su gestión, el mandatario tabasqueño a pesar de todos los pesares –y de las fuertes guerras mediáticas en su contra-- sigue bateando por los 400.
Dígalo si no. Aún con todas las adversidades que ha enfrentado a lo largo de su administración, AMLO se ha crecido al castigo y ha sorteado con sobrada habilidad política dificultades y enormes vicisitudes logrando mantener un alto porcentaje de aprobación de acuerdo a los diferentes estudios de opinión que regularmente realizan consorcios especializados en la materia.
Un botón de muestra: en la más reciente encuesta realizada por Demoscopia Digital, S.A. (última semana de octubre pasado) resalta el hecho de que, a diferencia de lo que ha sucedido con otros Presidentes de la República que en su quinto año de gobierno llegaron a enfrentar un gran hartazgo social, el Presidente AMLO registra un envidiable nivel de aprobación (71.3 por ciento).
El estudio realizado por la citada empresa fue aplicado a personas mayores de 18 años de todos los estados de la República Mexicana registrando el dato de que solo el 28.7 por ciento no está de acuerdo con la forma de gobernar del Presidente.
En todo esto hay que observar algo más: a pesar del pedregoso y accidentado camino transitado en sus 5 años como mandatario del país, López Obrador ha logrado mantener un alto porcentaje de aceptación entre los diferentes sectores de la población mexicana. Solo en el año 2020, entre los meses de marzo y mayo –y todo mundo sabe el pórque--- obtuvo calificación baja fluctuando entre los 55.7 y 53.2 por ciento. Pero de ahí pal real, la línea aprobatoria a su gobierno ha sido ascendente, contrario a lo que en otros sexenios ocurría frecuentemente que a medida que se acaba el período de gobierno se extinguía el poder presidencial.
Así es. Recuérdese que los mandatarios de la Nación al cruzar el umbral de la mitad de su sexenio, en vísperas de los acomodos y reacomodos en preparación de su relevo empezaban a disminuir simpatías al grado de que cuando llegaban al Quinto Año de gobierno –ya en plena decisión de los respectivos sucesores— iban en caída libre en sus niveles de aprobación o popularidad.
Ahí están los datos históricos aportados también por Demoscopia Digital: El Presidente Felipe Calderón Hinojosa inició su gobierno con un nivel de aprobación de 54.7 por ciento y concluyó en un 52.1 por ciento, en tanto que Enrique Peña Nieto, al iniciar tenía una aprobación del 55.4 % y vino a terminar con un pírrico 22.3%.
Calderón llegó a su quinto año de gobierno con una aprobación de 61.6 por ciento (muy lejos del 71.3 por cierto de AMLO), mientras que EPN solo alcanzó, a esa misma altura de su administración, una aprobación del 17.6%.
Hoy cuando el Presidente López Obrador prácticamente está a 11 meses de concluir su mandato, y pese a la guerra soterrada que mantienen en contra de su gestión grupos y partidos opositores, o de los problemas que subsisten como el de la inseguridad y/o violencia que afecta muchas regiones en el país, el balance puede considerarse positivo si se toma en cuenta el clima de libertades –que a veces algunos quieren convertir en otra cosa-- que existe al interior de todo México.
Inclusive, en el escenario político –y de ello todo mundo es testigo— se están generando las condiciones para que en el contexto del marco legal existente los mexicanos podamos tener en el 2024 una jornada cívica electoral civilizada y a la altura de esa gran transformación por la cual pugna la mayoría de nuestra sociedad.
Entrelíneas.....
Por eso hay quienes coinciden en afirmar que, a estas alturas del sexenio de la 4T, en términos beisboleros, AMLO sigue bateando por los 400.****¡Paren máquinas!, parece decir el mensaje emitido por la cúpula morenista; que nadie se mueva!, cero proselitismo, cero actividad de quienes aspiran a ser coordinadores estatales de la 4T, viene un impasse y a esperar el día en que se conocerá la verdad. (altar_mayor@yahoo.com.mx)