Anoche, Alejandra Rivas Gómez, de 35 años, fue velada por sus familiares en su casa de Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco. En medio de los rezos, su papá Dagoberto Rivas aseguró a MILENIO que la Fiscalía de Colima aun no entrega el cuerpo de la niña, hija de Alejandra, de un año de edad. Espera que el asesinato de su hija no quede impune.
Familiares piden justicia
El cuerpo de Alejandra llegó ayer por la tarde-noche. El féretro de color caoba fue colocado en el interior del domicilio, sobre éste reposaba una fotografía de ella con su rostro rubio sonriente y angelical. Detrás fue colocada una imagen grande de la Virgen de Guadalupe, de la que era creyente.
Alejandra había sido reportada como desaparecida desde el 1 de noviembre tras salir de Tlajomulco con rumbo a Colima a una cita que tenía con el papá de du hija, pero fueron halladas sin vida el pasado sábado 9 de noviembre.
- Ambas fueron encontradas muertas en un predio. La policía no ha ofrecido mayores detalles para no entorpecer las investigaciones.
- La noticia sobre el hallazgo del cuerpo fue confirmada en redes sociales por su primo, Alberto Rivas, quien también manifestó la preocupación y el dolor de la familia ante la situación.
Alejandra y María José emprendieron el viaje con el propósito de encontrarse con el padre de la niña, un hombre con quien Alejandra había tenido poco contacto y cuya intención de reunirse le generaba temor, según reveló a su madre en un mensaje de audio antes de desaparecer.
En el mensaje, Alejandra expresó que "le daba miedo" el encuentro, ya que conocería en persona al hombre que, según informes, se identifica como Mariano "N". Fue la última vez que su familia tuvo contacto con ella.
El hallazgo del cuerpo de Alejandra en Colima ha encendido las alarmas entre las autoridades y la sociedad quienes exigen justicia. La Fiscalía General del Estado de Colima informó que se han recabado pruebas a través de videos, geolocalización y entrevistas que han permitido identificar y ubicar a un presunto responsable del caso.
Aunque oficialmente no se han revelado nombres, en redes sociales y entre activistas se señala a Mariano "N", padre de María José, como el principal sospechoso del crimen. Este caso ha causado conmoción y ha sido objeto de protesta por colectivos feministas y sociedad en general, quienes han manifestado su indignación y han exigido justicia para Alejandra y la pronta localización de María José.
En un contexto de violencia de género y desapariciones forzadas en México, el asesinato de Alejandra y su hija exponen una vez más la vulnerabilidad que enfrentan muchas mujeres y niñas en el país.