Esperan dos horas el trasporte público
Usuarios denuncian que los choferes cambian las rutas o los dejan lejos
Hasta dos horas es lo que las personas se demoran esperando en el municipio de Centro el transporte público que los llevará hasta su escuela, trabajo y hogares, en ocasiones ante el desespero caminan kilómetros para poder tomar una combi, taxi o camión.
Ese es el caso de Juan Jacinto, quien vive en la ranchería Río Viejo segunda sección, donde apenas hay suficientes unidades para abastecer a toda la población de la zona y que a su avanzada edad camina a 2 kilómetros de manera diaria porque la combi lo deja muy alejado de su destino.
“No nos queda de otra, ahorita con este sol, ahí ves en la calle principal a las señoras con sus bolsas de mandado, y pues sí pesan, pero los de la combi cambian o quitan las rutas y los que tenemos que padecer somos nosotros todos los días para salir a algún lado”, manifestó.
Otro problema que los pobladores de Centro padecen son la eliminación de rutas, como, por ejemplo Siglo XX - Río Viejo, Buenavista- Rovirosa o Tierra Colorada- Pagés Llergo, mientras que aunque existen las rutas los pobladores rebasan la demanda son hacia la ranchería González y Emilia-o Zapata.
- Rebeca es otra ciudadana que padece de la larga espera del transporte público, sale de su casa desde la 7 de la mañana, aunque entra a las 9, pero sabe que para llegar a su trabajo debe transbordar al menos dos combis y esto es porque la comunidad en donde vive en la ranchería Buenavista además de acortar las distancias que recorrían, son pocas las que la dejan cerca de su destino, porque la demanda se ha visto rebasada por la población.
FALTA POR AVANZAR
- Autoridades de la Secretaría de Movilidad destacan que se han renovado unidades de transporte público, sin embargo todo parece indicar que aún falta mucho por avanzar en este tema, tan solo en un recorrido realizado por el Sistema Informativo de Tabasco se pudo observar que varios de los vehículos no cuentan con servicio de aire acondicionado, ya sea porque se les ha descompuesto el mecanismo eléctrico o bien porque la unidad no tiene los cristales de las ventanas.
Miriam junto con sus hijos abordan la ruta de Méndez-Santa Elena y en ocasiones, sin importar el calor sofocante que tan pronto pegan a la piel los rayos del sol hacen sudar a los usuarios, reclaman al chofer del camión el cobro del pasaje, porque este no cuenta con el aire acondicionado.
“Ya van varias veces que nos cobran como si trajera el clima prendido, y el único aire que se siente caliente es del sol que hasta nos agobia y nos deja sudorosos, yo le he reclamado al conductor cuando me cobra de más porque no es justo pagar por algo que no nos dan”, expresó.