El gobernador del estado sostiene que Tabasco mantendrá austeridad en 2023

Continua la austeridad

• En 2023 en Tabasco se mantendrá la política de austeridad republicana, por lo que se aplicarán una serie de medidas en las diferentes dependencia estatales, para reducir gastos, sostuvo el gobernador del Estado, Carlos Manuel Merino Campos.

En este sentido, puntualizó que este año se continuará privilegiando el fortalecimiento de las finanzas públicas, a través de la asignación eficiente de los recursos, con orden, racionalidad y disciplina presupuestaria.

Confirmó que el Paquete Económico 2023, aprobado en diciembre pasado por el Congreso del Estado, contempla un gasto de 62 mil 275 millones de pesos, 6 mil 320 millones más con respecto a la de 2022, lo que representa un incremento de 11.3 por ciento.

“Acorde a la política de austeridad que delinea el Presidente Andrés Manuel López Obrador, el presupuesto será orientado a cubrir las necesidades de desarrollo social, particularmente en las áreas más sensibles como la salud, la asistencia social, la educación, la seguridad y protección ciudadana, y el desarrollo del campo”, remarcó.

Además, señaló que con el presupuesto 2023, también dará continuidad al impulso de la obra pública, orientado principalmente al mejoramiento de la infraestructura carretera, de calles y puentes, así como de agua potable y alcantarillado en los 17 municipios de la entidad.

Por ello, exhortó a las dependencias a emplear una política de ahorro y buen consumo, en temas como el uso de combustible, energía eléctrica e insumos, además de adelantar posibles ajustes en horarios laborales para incrementar los ahorros.

Hay que recordar que a nivel nacional el Presidente de la República, desde el 27 de julio del año pasado refirió que su administración pasaría de la austeridad republicana a la pobreza franciscana.

Rumbo a la recta fina de su administración, dijo que se implementará una nueva etapa de austeridad en la que se estiman ajustes como limitar viajes al extranjeros y disminuir viáticos de funcionarios públicos.

Además, la administración federal ha dejado claro que gobernaría con una política de austeridad, por lo que el Congreso de la Unión aprobó la Ley Federal de Austeridad Republicana en la que se incluyó la cancelación de pensiones de expresidentes de la República, se prohibió la contratación de seguros privados de gastos médicos y de vida y se limitó la remodelación de oficinas por cuestiones estéticas a las dependencias y los funcionarios.

En este sentido, la administración estatal, ha dado a conocer que se reducirán gastos al interior de las dependencias, para privilegiar los recursos a los sectores más vulnerables.