?“Agradezco tener trabajo, pero no de esa manera": empleado de funeraria

EE: Sencillamente no puedo expresar mis sentimientos pues a diario convivo con la muerte.

Ahí, sentado en el área del conductor de una carroza de color gris, estaba Enrique Eduardo “N” ordenando algunos papeles que estaban sobre una tabla de madera.

Verificaba que no le faltara ya alguno, mientras esperaba a su compañero de trabajo, quien dentro de una oficina improvisada del Registro Civil esperaba que concluyeran la realización de un acta de defunción.

Con el pelo “ relamido” hacia atrás y portando cubrebocas negro, solamente nos observó para hacer un movimiento de la cabeza en señal positiva de que aceptaba la entrevista, sin fotos, pues podría peligrar su trabajo.

“Hay reglas que pusieron los de Salud para no platicar con ustedes, no darles datos pues”, fue su comentario.

Puntualizó que desde que fueron convocados por la Secretaría de Salud para el manejo de cadáveres catalogados con COVID-19, ellos son otro sector que están siendo mal visto, ”por eso de los contagios".

Pero al desempeñar su trabajo, tienen que tomar todas las medidas preventivas a su alcance, primero en su cuidado personal, luego en el cuidado de sus carrozas y por último en el trato de su cliente.

“Ha sido muy difícil, pero alguien tiene que hacer este trabajo, siempre lo hemos hecho; pero ahora hay riesgos visibles” dijo mientras relataba la forma de como reciben el cadáver, como es el manejo del mismo hasta sepultarlo o incinerarlo según la decisión del familiar.

"¿Has visto algún velorio en estos tiempos? No, ¿verdad? Por ser un país donde se les reza a los muertos, desde hace 50 días esto se ha paralizado totalmente... Es más, no hay velorios, buenos a mí no me ha tocado tal petición”, expresó.

Regresando a su experiencia de vida, Enrique Eduardo da a conocer que por herencia de su padre este trabajo lo realiza, pues al ser un negocio familiar, sigue vigente.

“Siempre hemos vivido de la muerte de otros, casi todos los días convivimos con ella”, dijo, esbozando una sonrisa.

“Suena irónico, pero así es mi trabajo, en estos momentos he tenido mucha, pero mucha carga de trabajo, y esto se debe a la irresponsabilidad de la sociedad", afirmó.

“Agradezco tener trabajo, pero no de esa manera, que por no cuidarse se contagian y caen rápido en nuestras manos”, concluyó

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