Ofrece Sheinbaum cuidar legado de ALMO

Arropada por cuatro excorcholatas, gobernadores y la dirigencia nacional de Morena, Claudia Sheinbaum recibió  anoche de manos del presidente Andrés Manuel López Obrador el bastón de mando para dar continuidad al movimiento de transformación. 

Tras ganar la encuesta por la coordinación de los Comités por la Defensa de la Cuarta Transformación, Sheinbaum afirmó que los morenistas y sus aliados tendrán la certeza de que estará a la altura de las circunstancias, caminarán juntos y juntas, en unidad. 

“Jamás traicionaré el anhelo de seguir construyendo un México aún más justo, fraterno, soberano, libre y democrático”, señaló en su mensaje frente a la militancia y simpatizantes morenistas.

Afuera del restaurante “El Mayor” donde se celebró primero una reunión privada encabezada por el jefe del Ejecutivo federal, Claudia advirtió:

“Desde aquí les digo: Jamás voy a mentir, jamás voy a robar y jamás voy a traicionar al pueblo de México”.

Con el bastón de mando portado en la mano izquierda, se comprometió a tomar este símbolo que es la representación de los valores más profundos de nuestra historia viva, de los pueblos indígenas. 

“Lo tomo con orgullo y compromiso, y con humildad, pero con la plena responsabilidad de continuar el rumbo trazado, el de la transformación que ha iniciado el presidente Andrés Manuel López Obrador”, expresó la virtual candidata de la alianza Morena-PT-PVEM.

UN HONOR ESTAR CON OBRADOR 

Y agregó: “Lo digo fuerte, para que se oiga lejos, es un honor estar con Obrador”, al tiempo que sus simpatizantes coreaban la arenga.

En otra parte del mensaje, Claudia Sheinbaum subrayó que un país no puede prosperar cuando se apoya al más próspero. 

“Dicho de otra manera, por el bien de todos, primero los pobres”.

• Más adelante reprochó a la oposición porque nunca cumplieron sus promesas y no lo podrán hacer, porque “marcharon al mismo compás del desafuero, del fraude”. 

Denunció que quieren regresar los del pasado con una máscara de cambio, pueden usar disfraces de feministas, de demócratas o el más reciente de ciudadanos que llaman a una falsa reconciliación.