NOTA BENE
Esa dulce “tortura China” que sufren los saqueadores
Como un goteo permanente, como una tortura china, reciben los saqueadores el hecho de que se den a conocer los cabos sueltos de la trama del “nuñismo” que están saliendo a la luz un día sí y otro también. No hay que profundizar mucho en las investigaciones ya que solo con “rascar” en la superficie de cualquier dependencia sale la mugre a relucir.
No tuvieron mucho cuidado en esconder sus miserias, “empoderados” por la soberbia de creer que estaban a salvo tras las faldas de quien era la directora de la orquesta, y la dueña de la batuta, con la que se interpretó la canción de la impunidad prometida que ahora, por fortuna, está a punto de ser proscrita para siempre.
Por lo general, cuando se han dado este tipo de situaciones, casi siempre, existe lo que se denomina, en el argot jurídico, la figura del “Testigo Protegido”, que algunos salientes del gobierno anterior del anterior se ofrecieron a ocupar, pero que a la vista está que no es necesaria en esta etapa de la historia.
Esos testigos protegidos, por lo general, dan a conocer detalles ocultos de ilícitos que permiten a las nuevas autoridades hacer el rastreo de las pruebas y evidencias con la certeza de que serán suficientes para encausar a los delincuentes de cuello blanco y obtener su culpabilidad ante un juez y su condena.
A cambio, esos testigos protegidos, que han sido responsables, cómplices o conocedores de uno o varios delitos, se ven beneficiados con rebajas de sus propias penas o, en algunos casos, de amnistías definitivas acompañadas de una especie de exilio forzoso del territorio en el que se han llevado a cabo esos crímenes.
Esa figura se dio, por ejemplo, en el saliente gobierno de Andrés Granier y los nombres de los que colaboraron con la administración “nuñista” son conocidos por un grupo selecto, de apenas tres o cuatro personas, que se comprometieron a no revelar nunca, por ningún motivo, sus nombres.
Pero en este caso no ha sido necesario recurrir a protección alguna, de testigo alguno, porque está todo muy claro. No tuvieron cuidado en maquillar las pruebas porque estaban completamente seguros de que su impunidad estaba garantizada.
De ese tamaño era su ingenuidad y su error, que hoy están comenzando a pagar cada día que se dan a conocer sus gastos fuera de presupuesto, sus contratos de compra o de renta ridícula abusivos, o sus viajes con gastos pagados o sus jugosos negocios criminales en todas y cada una de las áreas que compusieron el gobierno de Tabasco en esa época que ya es de triste memoria.
Con la incertidumbre que genera todo esto y que me consta están pasando, -por más que se refugien en la Ciudad de México o en Chiapas, o en las islas Caimán-, sus nervios están a punto de estallar y por supuesto eso generará que ellos mismos sean los que pidan un trato por encima de la ley para salir lo mejor que puedan del agujero en el que se metieron por ambición y codicia.
Lo que llena de orgullo es ver como nuestro Gobernador, Adán Augusto López Hernández, lleva este asunto sin el menor asomo de venganza y se ciñe a la ley en el proceso de investigación que ha exigido sea sólido y profundo, sin tacha y con todas las pruebas y evidencias. Ya nos encontramos más o menos a medio camino. Por lo que recomendamos, una vez más, no comer ansias que veremos que se hace justicia con los que se han hecho acreedores a ser justiciables.