Delegados municipales y votaciones: devolverle el poder al pueblo

Con el argumento de que la figura de los delegados municipales había sido "pervertida" por los partidos políticos, pues la usaron con fines políticos, una mayoría de diputados (de Morena), aprobó en 2021 una reforma que buscaba darle "mayor funcionalidad" al trabajo de las autoridades y se decidió que ya no sería electos por el pueblo sino designados por los alcaldes. Lejos, muy lejos del principio obradorista de que "el pueblo no se equivoca".

Una de las primeras medidas que Javier May tomará cuando asuma la gubernatura –no dudo de su triunfo el 2 de junio- será enviar una iniciativa de reforma a la Ley Orgánica de los Municipios del Estado de Tabasco, para que nuevamente el pueblo elija a los delegados municipales mediante elecciones, y no el Cabildo, como ahora.

Es uno de los 50 compromisos presentados en Paraíso por el candidato a la gubernatura por Morena, PT y PVEM en el arranque de su campaña y que ha remarcado en sus eventos proselitistas. La reacción de la gente ha sido de júbilo. Hace tres años se le quitó el derecho a elegir a sus representantes ante el gobierno municipal.

El 16 de julio de 2021, el Congreso local aprobó la iniciativa enviada por el Ejecutivo estatal con 22 votos a favor, cinco en contra y cero abstenciones. Se modificó el artículo 103 de dicha ley, en el cual se asienta que los delegados y subdelegados, serán designados por la mayoría de los integrantes del Cabildo a propuesta del presidente municipal.

Esa reforma generó inconformidad ciudadana. Hubo protestas y movilizaciones. Los ciudadanos expresaron su repudio a esa resolución del Poder Legislativo a la que bautizaron como "ley dedazo."

No todos los municipios acataron esta reforma. Comalcalco, gobernado por Efraín Espadas Méndez, siguió dejando en manos de la gente la elección de los delegados y subdelegados municipales.

El asunto terminó en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. El máximo tribunal del país desechó la acción de inconstitucionalidad, quedando firme el decreto 299 aprobado por la Cámara de Diputados.

Desde un principio, los llamados "fundadores" de Morena reclamaron la contradicción de quitarle poder al pueblo, a la democracia directa. Hay otras formas de corregir los desvíos y no la anulación de un derecho. Es la posición correcta de May Rodríguez.