Cual el fin último de las políticas
En verdad es muy triste ver cómo personajes preparados por nuestra máxima casa de estudios en México, en vez de haber desarrollado una conciencia social para con su país
En verdad es muy triste ver cómo personajes preparados por nuestra máxima casa de estudios en México, en vez de haber desarrollado una conciencia social para con su país, han experimentado una social conciencia de aberración contra México. Tal es la ambición por el dinero público de fácil acceso, que todo cuanto se hace para favorecer a la mayor población posible, les provoca contrariedad y molestia.
Con motivos de la guerra Ucrania Rusia, el alza del petróleo han sido un detonante en el mundo para disparar los precios en todos los países, las gasolinas al igual que otros combustibles, son un factor de costo en una inmensa cantidad de productos procesados, no procesados y de servicios para la población. Con el propósito de evitar que esta alza afecte a productores, comerciantes, servidores y población en general, el gobierno ha evitado el alza en el precio de las gasolinas.
En el transcurso de esta semana se han dado a conocer algunos “Análisis” puramente economicistas que bien parecen ejercicios escolares, donde sólo se trata de desmeritar las políticas de apoyo a la sociedad que median como subsidios a los precios de las gasolinas.
El Impuesto Especial sobre Producción y Servicios IEPS, es un gravamen que se paga por la producción y venta o importación de diversos productos y servicios, tales como: las gasolinas, alcoholes, tabaco, Juegos de sorteos, cervezas, bebidas refrescantes y las telecomunicaciones.
El Sistema de Atención Tributaria SAT, nos describe que el IEPS al igual que el IVA, es un impuesto indirecto, que no cubren directamente los contribuyentes. En el precio de la gasolina, el impuesto está considerado en el precio del combustible, sea esta Magna, Premium o Diesel. La Ley del IEPS indica que este tendrá ciertas cuotas, dependiendo del precio de las gasolinas: Gasolina menor de 92 octano, 36.68 centavos por litro; mayor o igual a 92 octanos, 44.75 centavos por litro; Diesel 30.44 centavos por litro. Datos del Diario Oficial de la Federación.
Recientemente, la secretaria de Hacienda dio a conocer estímulos fiscales, lo que significa que la dependencia subsidiara impuestos, como el del IEPS, para que los consumidores no se vean afectados en sus bolsillos debido al incremento en el petróleo alrededor del mundo y otros factores como la producción propia de los combustibles, el costo de traslado, logística y los márgenes de ganancia de los expendedores.
En un “estudio” firmado por un famoso articulista, nos refiere de manera porcentual que en nuestro país se destina una proporción más alta de ingreso mensual promedio (4.8 por ciento) para llenar un tanque de 60 litros o 16 galones de gasolina de acuerdo a la plataforma Statista, lo anterior a pesar del estímulo que el gobierno aplica, colocándose arriba de EU y Canadá donde existe un mercado abierto.
Aquí, es importante destacar que la disparidad porcentual es evidente, ya que se da de acuerdo a los montos de ingresos promedios que corresponde a la riqueza laboral en cada país, lo que no señala, es que esto acontece no obstante que los sueldos y salarios en México han tenido importantes incrementos durante el presente gobierno, que de haberse continuado con los paupérrimos aumentos al salario de los gobiernos anteriores y los gasolinazos, seguramente estaríamos en una situación muy deplorable y lamentándonos como ocurre ahora con muchos países, como Reino Unido, España y otros donde comienzan a haber inconformidad por los precios del combustible.
En otro de estos “análisis”, el periodista José Yuste, calcula que la hacienda pública dejo de ingresar durante el 2021, unos 100 mil millones de pesos; la renuncia al cobro del impuesto a las gasolinas ha crecido, la gasolina sigue vendiéndose alrededor de 21pesos, de otro modo andaría en unos 27 pesos.
En otro “Análisis” el periodista Enrique Quintana, hace sus proyecciones y nos dice que de mantenerse las cosas así, el agujero fiscal para el gobierno podría llegar a los 300 mil millones de pesos durante el 2022, a estas personas en sus estudios, se les olvidad que el fin último de las políticas del estado, deben estar encaminadas al beneficio de las personas, no a la salva guarda de los fríos números.