Reaparece en África virus salvaje de polio, países se encuentran en peligro

La detección de un caso de polio es un evento de extraordinaria importancia (se estima que hay un caso de polio paralítica por cada 200 infecciones). Consecuentemente con esto, la OMS, el GPEI, el propio gobierno de Malawi y otras entidades implicadas están poniendo en marcha, de forma urgente, equipos de análisis e intervención con objeto de intensificar las labores de inmunización para cubrir bolsas de población infrainmunizadas y mejorar el estatus inmunitario global, y las de vigilancia epidemiológica y análisis virológicos.

África fue declarada libre de polio salvaje el 25 de agosto de 2020, después del último caso registrado en el norte de Nigeria en 2016. El caso notificado ahora en Malawi no compromete el estatus del continente africano, pues es un caso importado, pero podría llegar a hacerlo si se iniciaran nuevas y sucesivas cadenas de transmisión entre niños y adultos susceptibles de grupos de población infrainmunizados.

Malawi está situado en el sureste del continente africano, tiene una superficie similar a la de Castilla y León y Galicia juntas, y unos 18 millones de habitantes. Ocupa el puesto 174 según el Human Development Index (HDI) Ranking, con una esperanza de vida al nacer de 64,3 años, una media de 4,7 años de escolarización, y unos ingresos medios per cápita de 1035 dólares/año.

Pese a las dificultades, con la asistencia de Gavi, UNICEF y otras entidades, mantiene un buen nivel de coberturas vacunales básicas desde hace unos años (UNICEF, jul/2021): por ej. en 2020, primera y segunda dosis de sarampión 90 y 75 %, respectivamente, tres dosis de vacuna oral de polio en el primer año de vida 93 % y, al menos, una dosis de vacuna antipolio inactivada, 91 %.

En 2021 solo se notificaron 5 casos de polio salvaje, cuatro de ellos en Afganistán y el caso restante en Pakistán. Estos dos países son, hasta ahora y desde hace ya unos años, el único reducto del único virus salvaje de la polio activo (VP1), después de la erradicación del VP2 en septiembre de 2015 y del VP3 en octubre de 2019. En los últimos dos años, dos factores, uno ya conocido y otro nuevo, han dificultado la lucha contra la polio en estos lugares: la inestabilidad política de la región (ahora especialmente en Afganistán) y la irrupción de la pandemia de covid que ha acaparado recursos y debilitado a los sistemas sanitarios y de vigilancia epidemiológica.

El repunte extraordinario de casos por virus derivados de las vacunas (sobre todo del VPdv2) comprobado entre 2019 y 2021 (sobre todo en 2020, ver imagen adjunta -Thompson, Lancet Infect Dis, 2021-) es causa de una gran preocupación por su potencial capacidad de extensión a países vecinos (en 2020, afectó a 24 países, la mayoría de ellos africanos). Las causas de este repunte de casos pueden ser (GPEI, UNICEF, jun/2021):

• Coberturas de vacunación insuficientes debido a la limitación de recursos de los países afectados y a los problemas de suministro de las vacunas orales e inactivadas (dosis fraccionadas de estas últimas).
• Disminución de los niveles de inmunidad de las mucosas al VP2 entre los niños pequeños, nacidos después del cambio de la vacuna oral trivalente a la vacuna oral bivalente.
  

• Patrones de migración regional que dan lugar a que muchos niños no puedan ser captados en las campañas de vacunación.
• Campañas de vacunación extraordinarias de limitadas intensidad y alcance (problema intensificado por la pandemia).
• Riesgo de nuevos brotes por el uso de la vacuna oral monovalente para el VP2 para el control de brotes y para la mejora de la inmunidad de poblaciones infrainmunizadas en áreas con baja cobertura de inmunización después del cambio mencionado antes. Esta circunstancia puede perder peso, manteniendo los beneficios de su uso, si realmente funciona como se espera la nueva vacuna atenuada que se está desplegando desde 2021

Mientras exista polio en un solo rincón del mundo, todos los países están en peligro. El objetivo de erradicar todo vestigio de este virus es alcanzable, pero recorrer los últimos tramos de esta larga carrera necesitarán de grandes y continuados esfuerzos de la comunidad internacional y los países afectados (esfuerzos financieros, políticos y científicos). Pakistán y Afganistán son, hasta ahora, los últimos reductos del virus salvaje de la polio, pero su abordaje enfrenta difíciles barreras.

El control de los brotes de polio por virus derivados de las vacunas necesita del uso de las propias vacunas atenuadas, mediante intervenciones de elevada intensidad y alcance y corta duración; y la propia vacuna atenuada sigue siendo la herramienta más eficaz para afrontar este riesgo.

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