Por “dolor y frustración”, un menor de 12 años se suicidó y dejó un recado póstumo en el que pidió perdón a sus padres y hermana y sugirió que le hicieran “un entierro bonito”.
El hecho ocurrió el pasado 26 de noviembre, cerca de las 19:00 horas, en un departamento ubicado en la colonia Federal, alcaldía de Venustiano Carranza, cuando Luis le dijo a Ernestina, su madre, que daría de comer a su mascota, la cual se encontraba en la azotea, en la zona de tendederos.
Más tarde, al percatarse que el menor no bajaba, Ernestina fue a buscarlo y lo halló suspendido de una cuerda atada al cuello, por lo que inmediatamente lo bajó y lo llevó a una farmacia de genéricos ubicada muy cerca de la vivienda, donde fue atendido por la médico tratante Thalía Quintero, quien confirmó que el niño ya no presentaba signos vitales.
El deceso se reportó al 911, por lo que acudieron policías preventivos, quienes inspeccionaron la azotea, donde encontraron un recado póstumo: “Mamá, papá y Xime (sic), hice esto porque ya no podía seguir así, ya sentía mucho dolor y frustración, lo siento mucho.
"PD háganme un bonito entierro".
"PD díganle a mis amigos que los voy a extrañar”.
Ante ello, la Fiscalía de Venustiano Carranza inició la Carpeta de Investigación CARPETA: CI-FVC/VC-5/UI-1 S/D/23086/11-2019, por homicidio culposo y por otras causas.
El pasado 12 de septiembre, este diario publicó que Kevin, de ocho años, se suicidó luego de discutir con sus familiares por el uso del teléfono celular. Según los padres del menor, el niño jugaba con su teléfono celular mientras la familia comía, por lo que el aparato le fue retirado. Más tarde fue reprendido por sus padres, lo que lo motivo a suicidarse.
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