Compra de Plantas Eléctricas a Iberdrola fortalece a la CFE

El anuncio de un acuerdo para la compra de 13 plantas (casi todas ellas de ciclo combinado), de la empresa española Iberdrola para de generación de energía es un triunfo para Manuel Bartlett, actual director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), quien con esta decisión verá fortalecida la capacidad de operaciones de los servicios que encabeza, de acuerdo a varios analistas financieros y del ramo energético.

El presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó que la adquisición de las plantas de Iberdrola es una “nacionalización” de ese segmento de la generación de electricidad que está en manos privadas. De esta manera, la CFE que cuenta con 39 plantas pasará a 55, de acuerdo al cálculo oficial.

• El mandatario federal explicó que la CFE tiene una participación del 39 por ciento en la generación de electricidad y el compromiso es que la empresa del Estado genere por lo menos el 54 por ciento. La decisión sobre Iberdrola va en ese sentido. Para el presidente López Obrador es fundamental tomar medidas para que no aumente el precio de la luz para los consumidores.

De acuerdo a López Obrador: “llevamos a cabo esta operación, esta compra para fortalecer a la empresa pública Comisión Federal de Electricidad (CFE) y, de esta manera, poder ofrecer la energía eléctrica a precios justos”.

INTENSA LUCHA POR LA SOBERANÍA

• Al igual que en su momento lo hizo el presidente López Obrador, el director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett Díaz, había señalado el riesgo de que los privados concentraran el mercado eléctrico del país y en especial de la región norte. Una de las empresas beneficiadas por la privatización impulsada especialmente por Felipe Calderón es Iberdrola, bajo figuras “ilegales” como el autoabasto y productores independientes.

De acuerdo a lo expuesto por Manuel Bartlett en durante el Parlamento Abierto de la reforma eléctrica en la Cámara de Diputados, en el autobasto se identificaron 110 sociedades “fraudulentas” que disfrazan de socios a clientes y los calificó de oligopolios.

Se estima que el mecanismo que disfraza la generación privada de energía es una simulación que involucra 243 centrales particulares con más de 77 mil 767 clientes. Aunque se supone que las sociedades de autoabasto no pueden vender energía, sí lo hacían conforme a los privilegios que concedió la reforma energética de Enrique Peña Nieto de 2013.

Bartlett Díaz dijo a los diputados que la afectación financiera para la CFE era de unos 10 mil millones de pesos por año. El despacho de electricidad para los privados es de privilegio, porque “no está sujeto a los criterios de costos variables de despacho económico y se benefician de la tarifa de porteo (tipo estampilla) a costa del resto de los generadores que usan la red eléctrica y que sí la pagan” (enero de 2023).

• Por si fuera poco, a los llamados “generadores independientes”,  la CFE debe pagarles el 100% de su energía, aunque no cubran el total, lo que obviamente provoca pérdidas en la empresa estatal. Dijo entonces el directivo: “Además se les inventan ‘excedentes’ que no podrían tener, por tanto ilegales que usan para crear empresas y hacerle la competencia ilegal a la CFE”.

En defensa de la reforma eléctrica propuesta por el presidente López Obrador, Bartlett Díaz advirtió que los privados buscan quedarse con el mercado mexicano, de manera que todos los esfuerzos de la CFE van en el sentido de recuperar el control de la generación y frenar el desmantelamiento impulsado por el llamado modelo neoliberal.