"No pases por ahí, porque te espantan" relato de La ceiba del diablo en Gaviotas

Ahí, se encuentra una ceiba de más de seis metros de altura que ha sido testigo mudo de los aconteceres y cambios que ha tenido la capital del estado, misma que adoptó de la cultura popular aquel mote de espanto.

El apelativo que le dieron los ciudadanos, ante la supuesta aparición de una figura con rostro de demonio, su cuerpo era cubierto por una capa de color blanca, que a partir de las 18:00 horas se manifestaba ante todo aquel que pasara junto a la majestuosa ceiba.

Recordando el profesor Mateo las palabras que sus padres le aconsejaban para evitar esos senderos que llegaban hasta lo que hoy es conocido como “El paso del Macuilis”…. “no pases por ahí, porque te espantan”, dijo que la historia comenzó a tomar fuerza en todos aquellos ciudadanos que vivían del otro lado del río, quienes señalaban que en los terrenos donde se daba “La Manga”, realmente vivían momentos terroríficos que podían arrancar tu alma.

Comentó que se veía una figura y muchos señalaron haber visto aparecer por los terrenos de la familia Ruiz quienes tuvieron que abandonar su casa y sembradíos ante la expropiación que hicieron las autoridades quien –en aquel entonces--  dijo que, de la orilla del río se tenía que medir cuarenta metros tierra dentro, ya que era propiedad del gobierno.

Indicó que la familia dejó atrás aquella ceiba donde espantaban y que de la noche a la mañana, dejó de aparecer el terrible demonio.

“Eran los tiempos en el que gobernó Leandro Rovirosa Wade cuando se descubrió que aquella temida figura demoníaca no era más que una representación de un individuo a quien todo mundo conoce bajo el mote de “El manatí” quien se disfrazaba para asustar a la gente”, agregó.

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