Centros integradores, una herramienta vigente para el desarrollo
Sin organización social, sin participación comunitaria, no hay nada, destacan
"Que el mejor gobernador de Tabasco ha sido Enrique González Pedrero, sin duda, concluyó Patricio Patiño Arias al anochecer de este jueves, quien laboró en la coordinación de Planeación de aquel sexenio. "
Si lo es, no es porque fuera un hombre culto o de mundo, lo es por las horas dedicadas en la organización social, en los centros integradores". "Trabajar horas y horas y horas, como un misionero, es lo que hace la diferencia a gobernar con Twitter, por medio de redes sociales, eso es lo que aseguró la idoneidad de la realidad de los 185 centros integradores, que dan resultados al cien por ciento", dijo.
En la conferencia "Los centros integradores contra el rezago social", dentro del ciclo Una Pasión Compartida, que impartió en el Foro Cultural del Hotel Viva, el maestro Patricio Patiño Arias dijo que la planificación del gobierno de Enrique González Pedrero inició con el programa de pisos, fogones y letrinas.
"Le siguieron los programas mínimos municipales, resultado de la consulta pública, el establecimiento de 185 centros integradores de cultura, con base en la participación social, que llevó a la consulta para elegir a candidatos a presidentes municipales", expuso.
Patiño Arias explicó que los centros integradores fueron estructurados con base en las ciudades hospitales de Vasco de Quiroga, que contaban con silos, hospitales, plazoleta, autoridad de justicia, rastro, mesones.
"Por ley se supo qué era una congregación, qué era una colonia, qué era una Villa y se asignaron por la Ley de Planeación Democrática facultades de lo que ahora denominamos presupuesto participativo, que en aquellos años simplemente se le llamó el Programa Operativo Anual", recordó.
PARTICIPACIÓN
Señaló que con los proyectos de la consulta pública fue atendida la demanda que requiere la sociedad para que viva mejor, "yo necesito un camino, agua, potable drenaje, el muro perimetral de la escuela". "Y la gente empezó a sentir que participaba porque se le preguntaba, y más cuando se le respondió con hechos, porque eran hechos los que estaban regresando, es un proceso democrático de participación pública, abierta", expuso.
Indicó que para 1984 ya se tenía un estudio territorial de 185 puntos, de comunidades, y para allá se fue el programa operativo anual, "que todavía no le llamábamos centro integrador".
Aclaró que hubo presidentes municipales que se oponían a cumplir con la demanda ciudadana porque eran obras que no tenían rentabilidad política, pero con todos los avatares que tiene una consulta, se tuvo el programa operativo que se firmó en las comunidades.
En Nacajuca, una comunidad que llevaba, varias décadas pidiendo el drenaje de 12 kilómetros, porque el que estaba a cielo abierto era una podredumbre, a la construcción prevista para año y medio, la comunidad la terminó en tres semanas.
Se llevó toda la tubería y el material, a cada kilómetro se puso al frente un ingeniero responsable y los habitantes salieron a participar, "era un pueblo en marcha trabajando en el afán de tener su drenaje en tres semanas, con contraloría social y sin el problema de licitaciones.
"Para la participación ciudadana, los vecinos realizaban sus asambleas comunitarias para definir quién iba a ser el presidente, por ejemplo, del comité de salud", indicó. Recordó que en una comunidad de Huimanguillo dos amas de casa fueron elegidas para cuidar la casa de salud, que no era más que un dispensario, pero tenían la ropa limpia para la cama y si había una emergencia avisaban a la cabecera municipal o a Villahermosa solicitando la ambulancia.
RESULTADOS
- Después para la salud preventiva llegaron los estudiantes de Medicina, y "sorpresa, cuando estaba terminando el primer trienio, los indicadores de morbilidad y mortalidad empezaron ir hacia abajo". "Recuerdo que el doctor Reynés Berezaluce, el Secretario de Salud, no podía creer lo que estaba viendo, y dio aviso a la Secretaría de la Salud de México; mandaron especialistas y se tuvo un estudio de todo el estado confirmando, que estaban funcionando el piso de cemento, que ya no se cocinaba en el suelo y que contaban con la letrina, estaban conteniendo los problemas de salud".
"Fue un dato que provocó euforia", dijo.
Para 1985, en el último año del primer trienio, ya estaba la idea de los centros integradores y el gobernador Enrique González Pedrero agarró como misión, la supervisión, todos los martes.
"El gobernador se ponía el hábito misionero y platicaba con la gente hasta que entendiera cuál es el concepto con el que se estaba echando andar un esfuerzo muy grande, que fue haciendo cultura", destacó. Dijo que con la planeación democrática en las leyes del Estado y de los municipios, el gobierno dio respuesta a la demanda socialmente organizada.
- Recordó que el presidente Amado Franco se salió del programa y construyó un frontón, qué se está echando a perder en la calle principal de Frontera, y le fue mal; terminó su frontón, pero tuvo que cumplir con la demanda social con recursos del municipio, que el Estado le adelantó, pero se los descontó en las siguientes administraciones.
"Los convenios tenían dientes, tenían sanciones", subrayó.
UN PASO A OTRO
Narró que en 3 años, el gobierno estaba funcionando por la respuesta a la consulta pública, entonces el siguiente paso fue aplicar esa participación democrática en la elección de candidatos a presidentes municipales, pero era algo que nadie creía. "Ah, ya decidieron, en la Quinta Grijalva ya saben quién es", decían.
Dijo que en el libro La democracia de carne y hueso, está el pasaje de cuando el Gobernador fue de gira de trabajo a Balancán.
- Un personaje le reclama fuertemente al Gobernador.
- Aquel señor asegura que ya sabe quién es el candidato -le señalan al Gobernador.
- El tipo no sostiene su dicho ante el Gobernador que ratifica lo de la consulta.
-Pues va a ser por consulta pública y aquí me voy a encargar de que así sea -responde el Gobernador. Ese personaje es Darwin González Ballina que le reclamó al Gobernador.
"Hay momentos fundacionales que nos llevan a otros", dijo Patiño Arias.