Guardianes de la cultura tabasqueña

Reafirmando el compromiso de proteger y promover la rica herencia cultural que define a la región y al país.

GUARDIANES DE LA CULTURA
  • Nombra el pueblo a las autoridades estatales guardianes de la cultura tabasqueña

En medio de un cielo nublado que se abrió paso a la claridad, el corazón de la ciudad vibró con los colores, sonidos y el orgullo de la diversidad en el marco del Día de la Nación Pluricultural.

Un evento cargado de simbolismo, en donde figuras claves de la política y la cultura local fueron reconocidas como "guardianes de la cultura", reafirmando el compromiso de proteger y promover la rica herencia cultural que define a la región y al país.

  • Este día, que conmemora la pluralidad étnica y cultural de México, adquirió un matiz especial en  la Plaza de Armas de Villahermosa, donde se reunieron diversas autoridades. José Ramiro López Obrador, secretario de Gobierno; Aída Elba Castillo Santiago, titular de la Secretaría de Cultura; Patricia Iparrea Sánchez, al frente de la Secretaría de Educación; Yolanda Osuna Huerta, alcaldesa de Centro; y Marco Rosendo Medina Filigrana, presidente de la Mesa Directiva del Congreso Local, así como del Contralmirante, Marco Antonio Muñoz Hernández recibieron de las manos de los maestros de la Universidad Intercultural un simbólico collar tejido de mimbre, como muestra de su nuevo título de "guardianes de la cultura".

El ambiente fue festivo desde el primer momento, con Samuel Valencia Hernández, un joven músico, ofreciendo una interpretación única de la pieza "Mis Blancas Mariposas" en lengua Yokot´an.

Los acordes en esta lengua originaria resonaron no solo en los oídos, sino también en los corazones de los asistentes, quienes no pudieron evitar moverse al ritmo de la melodía.

Estudiantes, maestros y autoridades fueron envueltos en un espontáneo y alegre baile, que demostró la fuerza viva de las raíces indígenas de la región.

  • La danza del caballito, acompañada del retumbar de los tamborileros y las imponentes representaciones de jaguares, llenó de magia la explanada de Plaza de Armas. Los cuerpos danzantes parecían llevar consigo el espíritu ancestral, recordando a todos los presentes la importancia de mantener vivas estas expresiones culturales que forman parte de la cultura de la nación.