El presidente de la Unión de Bodegueros de la Central Camionera, Simón Romero Herrera, precisó que en lo que va de la contingencia por el COVID-19, sólo tres comerciantes han cerrado sus puertas.
Sin embargo, tuvieron que volver abrir por presión de los mismos trabajadores, quienes viven al día y no pueden dejar de percibir sus quincenas.
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Aclaró que hasta el momento no ha habido recortes de personal, ni tampoco se han ajustado los sueldos o despidos, sino al contrario se da un recurso extra a sus empleados.
Aseveró que las ventas y el trabajo están al 50 por ciento, lo cual solo les alcanza para lo necesario como mantener abiertos los locales y poder pagar a los trabajadores.