Emiliano Zapata.- Reptiles venenosos amenazan la vida de personas que habitan en comunidades localizadas en las márgenes del río Usumacinta, los habitantes de ven obligados a exterminarlos para evitar que algún menor sea acatado por estos animales.
Debido a que las aguas del Usumacinta se han salido de su cause el habitad natural de diversos animales se ve invadido por lo que buscan la manera de resguardarse en zonas altas dónde las familias han construido sus casas en terraplenes para que el agua no los alcance al desbordar el Mono Sagrado.
Animales peligrosos
Víboras de cascabel y corales entre los más venenosos son localizados en los patios de las viviendas por lo que las familias temen que puedan ingresar y morder a un pequeño en un momento de descuido, por ello se ven en la necesidad de exterminarlos aún y cuando cumplen una función dentro del ecosistema.
Empresas que se dedican al cultivo de palma de aceite, a la construcción sistemas de generación de energía eléctrica a base de paneles solares cercanas a las comunidades de Pochote y Nuevo Pochote protegen todo tipo de animales silvestres sin embargo con la creciente del río buscan lugares secos para sobrevivir.