En los últimos dos años, se han incrementado hasta en un 100 por ciento los delitos contra menores en Tabasco, entre los que destacan violencia sexual, psicológica, física, explotación laboral y sexual.
Lo anterior, fue revelado por la presidenta de la asociación civil Aldea por los Niños, Alejandra Arias Gómez, quien destacó que antes de la pandemia 7 de cada 10 menores ya venían sufriendo violencia en el hogar, situación que se complicó con el encierro.
En entrevista con el Sistema Informativo de Tabasco (SIT), refirió que los municipios donde más se presentan estos casos son Centro, Huimanguillo y Cunduacán, los cuales han denunciado ante Aldea por los Niños.
Consideró que el prolongado confinamiento por esta pandemia ha disparado de manera significativa los problemas de salud mental y emocionales particularmente en niños y adolescentes.
“No hay que perder de vista que este confinamiento incrementó otra problemática asociada, como lo es la violencia intrafamiliar y el abuso contra niños y adolescentes y se da más en edades de 2 a 8 años y de 12 a 15 años”, resaltó.
Así también, señaló que en la mayoría de los casos, estos delitos son cometidos por quienes integran el entorno inmediato de los menores, por lo que el encierro y el entorno en el que habitan los menores, ha sido contraproducente.
Comentó que debido a que los menores pasan mas tiempo dentro del hogar con sus agresores, se han incrementado los abusos hacia los menores de edad, sobre todo hacia niñas, en un 70 por ciento.
“En el 90 por ciento de los casos de abuso, de violencia, de explotación contra la infancia, es cometido por el entorno inmediato del niño o la niña y esto ha aumentado en más de un cien por ciento en violencia física, violencia sexual, violencia psicológica, explotación laboral y trata de personas, por lo que es evidente que los menores, son la población que más ha quedado y sigue quedando indefensa”, apuntó.
En este sentido, mencionó que la asociación que encabeza ha documentado en 20 meses diversos casos de explotación infantil, laboral, sexual y física.
Comentó que la entidad es una de las que más carece de políticas, programas, estrategias de intervención y además, no cuenta con personal especializado, para brindar atención, por lo que es urgente implementar un sistema de protección a la niñez que sea realmente efectivo.
Por ello, pidió a las autoridades a ser sensibles ante la situación que enfrentan miles de niños, pues la falta de estrategias no permite incluso contabilizar de manera exacta la cantidad de infantes que sufren explotación y son violentados.
Mencionó que la ley general de niños, niñas y adolescentes obliga a los legisladores (federales y estatales) además de alcaldes a implementar medidas para legislar en protección a los menores, pero esto no se cumple.
Hay que señalar que de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), México es el primer lugar en abuso sexual infantil en el mundo, con un registro de 5.4 millones de casos por año.
La pederastia es el abuso sexual de niños y hasta 2020 había 24 entidades federativas del país que ni siquiera habían tipificado este delito. Tabasco, por el contrario, era una de las ocho que sí contempla penas para este ilícito.
En mayo del año pasado el pleno del Senado de la República avaló en lo general reformas al Código Penal Federal para eliminar la prescripción de los delitos sexuales cometidos contra menores de edad, por considerarse que muchos no pueden denunciar sino hasta muchos años después de pasar por ese trauma.
Además, datos de la Fiscalía General del Estado (FGE) apuntan a que desde 2018 y hasta el 2021, se presentaron un total de mil 688 denuncias por pederastia en Tabasco.
Es necesario recordar que la mayoría de los casos de abuso sexual a menores se dan en el entorno familiar, es decir, son cometidos por padres, abuelos, tíos, hermanos, primos o incluso amigos o vecinos. También pueden ocurrir en la escuela o la iglesia.
El Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) establece que de cada 100 denuncias 10 llegan a juicio y que del total registrado, sólo se condena una, por lo que 99 por ciento de los casos queda impune.
El Artículo 327 del Código Penal de Tabasco establece que este delito se castigará con pena de quince a veinte años de prisión y de mil a tres mil días multa.
El año pasado UNICEF hizo un llamado a las autoridades para garantizar entornos libres de violencia en todas las escuelas del país, así como mecanismos de denuncia, detección y canalización amigables y eficaces que protejan a todas las niñas, los niños y adolescentes de cualquier forma de violencia, especialmente la violencia sexual.
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