Tabasco se inunda porque perdió la visión fluvial: Firdaus Jhabvala

Los planes recientes han sido limitados y destinados al fracaso, advierte el doctor en Economía

Las inundaciones catastróficas seguirán en Tabasco mientras no se entienda que en el país se abandonó la visión fluvial, la que permitía aplicar políticas a nivel nacional y regional, con una concepción integral del manejo de los ríos; por eso los planes recientes han sido limitados y destinados al fracaso, advierte Firdaus Jhabvala, doctor en Economía, quien no sólo es un experto en planificación sino que conoce la problemática de la entidad, donde vivió y conserva familia. 

En el tema de las inundaciones como en muchos otros, subraya, el método no es congruente con el problema. 

En una larga conversación telefónica con Presente, desde su residencia actual en Houston, Estados Unidos, este experto nacido en India y nacionalizado mexicano, mantiene una permanente preocupación por México y por Tabasco.

Dice Firdaus Jhabvala Marshall para colocar el problema de las inundaciones en su contexto: 

“Cuando termina la Revolución Mexicana había una infraestructura hidráulica muy pobre para un país tan vasto como México. Los gobernantes se dieron cuenta y comenzaron haciendo obras hidráulicas, presas y bordos, pero con el principio de atender las necesidades de un país semiárido, obstaculizar el flujo de salida al mar y dejar el agua en tierra propia para la agricultura y para el uso humano. Entonces grandes presas fueron construidas en este periodo hasta los años 50 y luego comienzan a voltear a ver los exceso de las inundaciones en Tabasco y la posibilidad de sacar el agua del río Grijalva para la electricidad, es cuando combinan estos dos temas: generar electricidad y control de la inundación para hacer las cuatro presas que tenemos ahora Malpaso, Chicoasén, Angostura y Peñitas. Estas presas son de doble propósito. Existió una Secretaría de Recursos Hidráulicos (1946-1976), que tenía dos cosas importantes y que ahora a mi juicio no hay: una visión fluvial, de los ríos, del problemas hidráulico. No era estatal como ahora se trata de abordar. El problema se resolvía en todo lo largo y ancho del río.”

“Entonces –prosigue Firdaus Jhabvala- había una Comisión del Grijalva, como otras comisiones de diversas cuencas para administrar el uso del agua de varios sistemas en el país. Después de Luis Echeverría con José López Portillo en 1976 desaparece la Secretaría de Recursos Hidráulicos, se crea la Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos. Este tema pasa a una subsecretaria. La consecuencia: desaparecen las comisiones de los ríos y se termina la visión fluvial. Es importante porque hasta entonces se consideraba al río independientemente si está en Guatemala, en Chiapas, en Tabasco y las obras obedecían a estas características. Un primer error, porque a partir de ahí llego esta separación con la Comisión Federal de Electricidad y ya no se tenía el monopolio del manejo de las presas. Esa especie de control que había en el nivel federal se perdió”. 

TABASCO, BAJO EL AGUA

A partir del abandono de una visión integral de la red de ríos, explica el también fundador del Centro de Estudios e Investigación del Sureste (CEIS), el gobierno federal dejó de tener responsabilidad en las inundaciones y llegamos a la circunstancia de hoy.

Subraya el doctor Firdaus Jhabvala: “Quiero señalar esto como un error histórico, porque también se me hizo una torpeza cancelar la Comisión del Río Grijalva. Había investigaciones, trabajos, mucha labor en correspondencia con la agricultura, con el Plan Chontalpa. A partir de esta decisión la importancia de la inundación en el concepto nacional bajó considerablemente; la inundación se fue a ser un evento decenal, cada diez años había una inundación y todos corrían de acá para allá y decían que iban a hacer un plan. Y lo hacían pero sin la continuidad que había en la otra visión de la planeación del rio”.

De esta forma, “partir de los años setentas  el problema de las inundaciones de Tabasco primero fue independiente de la necesidad de cuánta agua podrás aguantar, el punto de saturación ya no fue importante en la planeación de cuánto se va a generar de electricidad. Creo que todavía no está ahí esa consideración. La otra cosa fue que el estado tenía que pedalear en solitario porque Tabasco era el único estado en condiciones de inundabilidad”.

“Entonces Conagua da la cara, que no es realmente la que está inundando porque es la CFE. Decía esta oficina que hay que hacer estos bordos y todos los programas hidráulicos que hemos tenido en una serie de circunstancia que nadie previó e hizo más inundable a Tabasco en el otro régimen y creo que todavía estamos ahí. Es un punto que me queda claro es un trasfondo del asunto”. (Mañana: Se hace un plan, pero se interrumpe).