Con 46 años de edad y próximo a cumplir 20 años de servicios en mayo del 2020, la enfermera originaria del municipio de Paraíso, de nombre Lupita N, quien pidió el anonimato para evitar ser violentada en la vía pública, todas las mañanas sale de su hogar rumbo a su trabajo como profesional de la salud.
La madre de familia de tres hijos, relató que todos los días sale en punto de las 7:30 de la mañana rumbo al Hospital Regional de Paraíso, para brindar el servicio a los pacientes que van al resurtimiento de recetas o controlados de enfermedades crónico degenerativas o embarazas, así como aquellos paraiseños con posible síntomas de la pandemia que actualmente mantiene paralizado al mundo.
En la charla con Diario Presente, reconoció que le da un poco de miedo su trabajo, pero al igual que muchas enfermeras que hay en el estado, se arma de valor y cuida todos los detalles de higiene, para no exponer a su familia ni a nadie.
“Esto es de mucho valor, pero en nuestras manos está ayudar al prójimo y es algo que tenemos que cumplir porque no sabemos si más adelante sea alguien de nuestra familia, así que en mi caso, procuro tratar a como me gustaría que me trataran, porque ese es nuestro trabajo”, puntualizó.
Explicó que el protocolo que llevan a cabo es llegar vestidos de civil para colocarse su uniforme en su centro de trabajo y así el virus no salga del hospital, con la ropa, además de que alterno a su jornada laboral desinfectan manos, zapatos, el uniforme es colocado en bolsas para llegar a lavarlo a su domicilio, evitando la propagación del coronavirus y que por portar el uniforme sean víctimas de violencia.
Te puede interesar: Darían hasta 6 años de cárcel a quien agreda a personal de salud en Oaxaca