Luego de 55 años de haber recibido su última remodelación, la escuela de Tamulté de las Barrancas, que es la más antigua de Tabasco y que actualmente aglutina una población estudiantil de mil 104 alumnos de cuatro primarias de turnos matutino y vespertino, fue prácticamente reconstruida en la mayor parte de su estructura, misma que este viernes será inaugurada.
El listón inaugural para estas obras en una escuela que fue pionera de la educación racionalista impulsada por Tomás Garrido, en los años 30, será cortado por el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, quién como gobernador atendió la demanda el 28 de diciembre del 2020, junto con el actual titular del Ejecutivo estatal, Carlos Manuel Merino Campos.
Para esta nueva edificación, en la que tan sólo en obras se destinaron más de 43 millones 363 mil pesos de recursos estatales, se levantó ahora un tercer piso en los dos edificios con los que consta la estructura original, al igual que el techado para las área de deporte, fueron construidas 32 aulas, una barda perimetral, dos canchas, comedores y una biblioteca, dos baños y la infraestructura de servicios de electrificación.
Además, será la primera escuela que cuente con un monta carga, que será una especie de elevador para los niños con barreras educativas especiales y un área de cómputo para las cuatro escuelas primarias, porque la que había anteriormente, estaba sólo asignada presupuestalmente, para una de las dos del turno vespertino.
Los alumnos ahora no sólo tendrán salones con un nuevo acabado y mobiliario, sino también con aire acondicionado.
Son sólo detalles que quedarán pendientes para el retorno formal de niños, en cuestión de días.
Por ello, Leticia Martínez Castillo, Directora de la Escuela primaria Ceferino Vázquez Osorio de Tamulté, dice que el millar de alumnos de estas cuatro primarias, que en los últimos meses tomó clases en escuelas de las colonias Atasta y Guadalupe Borja, como de la ranchería Ixtacomitán, ahora están ávidos por regresar a esta gran escuela.
“Sabemos que lo más pronto posible ya estaremos aquí en nuestras aulas. Es una una matrícula de más de mil alumnos en las cuatro escuelas aquí presente: La escuela Manuel Díaz Bartlett, la más antigua de Tabasco, en realidad es la que inicia aquí, luego, tenemos a la escuela Dolores Ocaña Brindis, tenemos al escuela Manuel de Jesús García Osorio y la Ceferino Vázquez Osorio”, refiere.
La maestra Leticia Martínez va más allá, al asegurar que esta escuela, que se encuentra a un costado del Parque de Tamulté, no sólo es ahora la más antigua, sino que también se perfila como la más grande, en infraestructura, por toda la obra física con la que se cuenta en beneficio de los alumnos.
Una gestión que, según confiesa, fue de muchos años y que ahora al ver hecha realidad, le invade de sentimientos por toda esa lucha.
“Es indescriptible la emoción, son sentimientos encontrados, porque muchas veces tocamos puertas; fueron años de gestiones para haber logrado, pues lo que hoy para nosotros era un sueño y hoy se convierte en una realidad. Sabemos que todo es por el bienestar de la niñez de Tabasco, son nuestro futuro; yo sé que con esta obra monumental que se les está entregando, al igual que los sentimientos que tenemos los adultos, los alumnos los sienten también”, expresa.
Ana Karen Pérez May, quien estudio en la primeria Manuel Díaz Priego, turno matutino de este gran complejo escolar, reconoce la calidad pedagógica de los maestros que por la reconstrucción tuvieron que trasladarse para darle clases a su hija a un plantel vecino, y expresa su satisfacción por el pronto retorno del magisterio y del alumnado.
“Los maestros, que dan clases, sí son de buen nivel, la verdad. Hasta la forma de explicar. Lo bueno, es que ya la va a estrenar mi hija. Lo bueno es que ya la cambiaron, porque sí tenía muchos detalles. Los salones, ya se estaban destruyendo, las bardas, hay lugares que tenían…como el patio, en el que están solo unos pedazos”, comenta.
Concepción Yazmín Domínguez Aquino, por su parte, agradece al Gobierno de Tabasco haber destinado recursos para esta reconstrucción, porque, según sus palabras, dará más aliento a los niños estudiantes para acudir a tomar clases.
“Al Gobierno, por haber dado esta rehabilitación a la escuela, y a esta que se nueva ahorita está bien, la verdad que sí está bien. Más que nada uno como padre de familia pues igual le da gusto que estén apoyando más a la educación en los niños, sobre todo en las escuelas, porque la otra si se veía un poco más deteriorada, y la verdad está bien, para mí está muy bien la escuela”, manifiesta.
“Se van alegrar los niños de ver su escuela más grandes, más bonita, bien pintada. Le realza más el ánimo a los niños para venir a la escuela”, añade.
La reconstrucción de este gran complejo escolar es, a como dice, Asunción García Isidro, la intendente de las escuela vespertina Ceferino Vázquez Osorio, es una obra que tiene satisfechos a maestros, alumnos y padres de familias.
“Estaba todo deteriorado, porque no sé cuántos años tienes tu escuela que se construyó. La directora y las maestras tocaron puertas para que el gobierno pudiera facilitar la obra y pues, gracias a Dios se logró. Todos están contentos, las escuelas cuatro escuelas y los directores los maestros y los alumnos también, porque pues es un es una obra que va a beneficiar a todos y a los alumnos, porque ya hay clima, los pizarrones están en buen estado; todo está muy bien”, dice la intendente.