El Presidente López Obrador cumplió su palabra y el puente que por décadas demandaron los pobladores chontales es una realidad y trae prosperidad para esa zona.
Este lunes, la obra será inaugurada por el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández y el gobernador Carlos Merino.
En el poblado Quintín Arauz, Centla, el sufrimiento de vivir por muchas décadas en el aislamiento ha llegado a su fin y la aflicción de las familias para atender de forma oportuna a sus enfermos, sin depender de una lancha o la panga, también será cosa del pasado.
El puente que comprometió el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, está totalmente concluido.
Este lunes 6 de febrero, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández y el gobernador Carlos Manuel Merino Campos, inaugurarán el anhelado puente y los habitantes de la antigua "San Francisco de Pial", comenzarán a vivir una nueva etapa de prosperidad y bienestar.
Enclavado en la Reserva de la Biósfera de Pantanos de Centla, a 88 kilómetros de la capital tabasqueña, Quintín Arauz y sus comunidades aledañas, con una población de 10 mil habitantes, están de júbilo.
Es un momento histórico, ya que contrario a las promesas incumplidas de una larga lista de gobernantes, la palabra del ahora mandatario federal, Andrés Manuel López Obrador, se ha cumplido y el puente es hoy una realidad.
Contratadas por la SICT, en diciembre 2021, las empresas Grupo Industrial Rubio S.A. de C.V., Merodio Construcciones S.A. de C.V. y Cimentaciones y Puentes S.A. de C.V., comenzaron su ejecución que contempló trabajos de terracerías, obras de drenaje, pavimento con carpeta de concreto asfáltico, señalamiento y obras complementarias; más de 840 metros lineales de construcción.
Concluido en enero de este año, a la distancia, en medio de un extenso espejo de agua que conecta con el Golfo de México, el puente Quintín Arauz roba la mirada, sostenido por 10 pilotes de acero, 13 apoyos y 11 pilas centrales.
Con una vista majestuosa, ya sirve como lugar de esparcimiento y punto turístico para los visitantes.
En la comunidad yokot´an rencarna la ilusión, como lo expresa el nombre de su colonia Nueva Esperanza, convencidos que esta superestructura - a base de trabes de acero-, les ayudará a impulsar el turismo, la actividad agrícola, la pesca, el comercio, la educación y el bienestar general de la población.
López Obrador asumió en aquel encuentro con los indígenas chontales, que la única regla de la nueva transformación nacional sería: primero los pobres y obras de beneficio general.
En lo que denominó el "reencuentro con sus orígenes", entre tierras bajas y una región aislada que recorrió hace más de 40 años, el jefe del Ejecutivo federal reiteró aquel día, que su gobierno seguiría apoyando a los más pobres y garantizó personalmente a los líderes de la comunidad la ejecución inmediata del proyecto.
"Hoy que la palabra empeñada del presidente está saldada", expresa José de la Cruz García, nativo de la comunidad, quien recuerda la lealtad y el amor de Andrés Manuel a las comunidades, y como junto a otros pobladores indígenas de esta zona lucharon por electrificación, camellones, caminos y servicios básicos de salud.
Comparte que López Obrador desde que fue director del INI, nunca los dejó solos y siempre mantuvo un acercamiento con las comunidades chontales, lucha por mayor justicia social que fue apoyada por el secretario de Gobernación, Adán Augusto, creando un vínculo de confianza y respeto.
Mientras se niega a recordar la etapa triste en la que fueron utilizados y engañados por algunos candidatos y gobernantes, Chilo adelanta que recibirán con mucha alegría al secretario de Gobernación, Adán Augusto, al ser una persona de toda la confianza del presidente, que personalmente conoce las comunidades chontales de la ribera del Usumacinta.
Relatan que además del gasto que representaba para las familias cruzar en lancha, transbordar y pagar la panga, alumnos y estudiantes sufrieron el calvario de tener que trasladarse fuera de la comunidad.
Emocionado, porque ahora puede cruzar el Usumacinta en su bicicleta las veces que quiera, al igual que toda la comunidad, don Gilberto solo espera el día que Andrés Manuel López Obrador regrese a Quintín Arauz para agradecerle personalmente la obra