En los centros de reinserción social de Tabasco se han registrado enfermedades crónicas, de transmisión sexual y respiratorias que han generado la muerte de al menos 55 reclusos en los últimos seis años, según reportó la Dirección General de Prevención y Reinserción Social del Estado.
El Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), el cáncer, los infartos y la tuberculosis son algunos de los males que se han identificado en los reos que deben cumplir alguna condena en la cárcel, y lo cual debe ser estudiado y observado por la autoridad para evitar la violación de los derechos humanos de los individuos que se encuentran recluidos, opinó el jurídico del Comité de Derechos Humanos de Tabasco (Codehutab), Efraín Rodríguez León.
El Centro de Readaptación Social del Estado de Tabasco (Creset), es el lugar que concentra el mayor número de defunciones desde el año 2012 al 2018, periodo en el que el año 2012 fue el que contabilizó la mayor cantidad de decesos.
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Según la recopilación de datos obtenida por Diario Presente, el VIH ocasionó la muerte de seis personas recluidas en los últimos seis años, mientras que la tuberculosis generó el fallecimiento de al menos 11 personas.
La neumonía y los infartos también se encuentran entre las causantes de los decesos, lo cual -en ocasiones- es consecuencia del estilo de vida que han mantenido los reclusos.
Ante los incidentes que se han presentado -especialmente con los diagnósticos de VIH- en el año 2017 la Secretaría de Salud dio a conocer el apoyo médico y los tratamientos que proporcionan en los diferentes centros de readaptación social y cárceles.
Los registros de la dependencia estatal señalan que desde el año 2006 se trata a las personas que presentan la enfermedad a través de los Centros Ambulatorios para la Prevención y Atención en SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (CAPASITS).
Además de que los pacientes con VIH/Sida que además presenten alguna otra enfermedad denominadas dentro del espectro de infecciones de transmisión sexual, también son atendidos en este tipo de unidades especializadas.
HAY OMISIONES
Dijo que las omisiones de la Dirección General de Prevención y Reinserción Social deben ser supervisadas por diversos organismos para regular el número de enfermedades que se detectan, debido a las pérdidas humanas que se han presentada por la presunta falta de atención médica.
Agregó que algunos centros se encuentran sobrepoblados y un ejemplo es el Creset, el cual fue diseñado para albergar a un promedio de mil 368 internos, sin embargo, su capacidad está por encima de las 2 mil personas.
Tabasco está debajo de la calificación media del país desde el 2006; en primer lugar está el Creset y le sigue la cárcel de Cárdenas.