Al inaugurar el nuevo puente carretero del poblado Quintín Arauz, una estructura que es la más grande del estado en su tipo y contribuye a dejar atrás el rezago ancestral que durante siglos vivieron los indígenas chontales asentados en la ribera del Usumacinta, el secretario de Gobernación (Segob), Adán Augusto López Hernández aseveró que la Cuarta Transformación que lidera el presidente Andrés Manuel López Obrador sabe cumplir a los más desposeídos.
Pueblo beneficiado
Arropado por el cariño y la solidaridad de ancianos, campesinos, amas de casa y jóvenes de al menos 20 comunidades originarias que, al ya no tener que esperar la panga para sacar sus cosechas o ir al médico, se verán beneficiadas con el puente de 852 metros de longitud.
El funcionario federal sentenció que con acciones de este tipo, el mandatario Andrés Manuel López Obrador combate la pobreza y marginación de quienes antes vivían en la desesperanza.
Adelantó que el Presidente de México también instruyó al Gobierno Federal comenzar a la brevedad un censo para emprender en la zona uno de los programas de vivienda más ambicioso de la historia, destinado a familias humildes, para que nunca más vivan en casas con techos de láminas ´que son verdaderos hornos´.
Adán Augusto López dimensionó el olvido en el que estaban sumidos los pueblos originarios, al recordar que la última acción de este tipo data de la década de los ochentas, durante el gobierno de Enrique González Pedrero, con el programa de pisos, fogones y letrinas.
Aseguró que esa es la esencia de la Cuarta Transformación: dar justicia a la gente, especialmente a los más necesitados.