La temporada decembrina es una de las épocas con alta incidencia de quemaduras en menores de edad, debido a que es común que se manejen más alimentos calientes y artículos de pirotecnia, informó la coordinadora auxiliar de Hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tabasco, doctora Ana Laura Sánchez Suárez.
- Explicó que para disminuir riesgos de incendios y accidentes en casa, es importante tomar medidas de prevención con las decoraciones navideñas para que sean de material retardante al fuego, si hay niños pequeños no utilizar esferas de cristal o adornos miniatura, ya que se pueden romper y provocar heridas o bien ser tragados por los menores.
- Sánchez Suárez destacó que el mejor tratamiento es la prevención, por lo que es importante que las familias mantengan cuidados especiales con los niños y niñas, no dejar que ingresen a la cocina, ya que representa el lugar más peligroso para sufrir una quemadura por escaldadura, es decir, por contacto con líquidos hirvientes como agua o aceite.
- Encomendó la especialista en pediatría que, una vez que llegan a quemarse, lo ideal es enfriar la quemadura con agua tibia para que se disminuya la temperatura de los tejidos lesionados, de tal forma que si una quemadura va a ser de tercer grado, lo podemos convertir de segundo grado. Después, el paciente debe envolverse en una sábana limpia y llevarlo a un hospital donde se le brinde la atención médica correspondiente.
Dijo que otras de las maneras más comunes con las que los menores sufren quemaduras es con el uso de juegos pirotécnicos, acercarse al fuego directo o manejar electricidad. Los conocidos como cohetes, palomas, bombas y cañones, por citar algunos, son más elaborados, tienen luz, sonido y hacen una explosión prácticamente rápida.