Nacajuca, Tabasco.- En su víspera con un niño en sus brazos, vestida con un traje especial celeste y colocada en un nicho rodeada de múltiples rosas naturales; se encuentra la imagen de la virgen de los Remedios a la entrada de la parroquia en Nacajuca, para recibir a las familias y pobladores chontales.
Desde hoy rendirán con sus enramas tributo durante dos días a la madre de Jesús llamada aquí virgen de los Remedios. La fiesta ha comenzado desde este miércoles con las tradicionales enramas, música de viento, misas, cantos, oraciones y sin faltar la algarabía total.
Desde la mañana, en la calle Benito Juárez con una imagen de la virgen venerada, a un costado del templo, con música de viento de la banda "Ángelical" llama la atención de los ciudadanos y creyentes.
La fiesta en honor de la virgen milagrosa de los Remedios, ha comenzado junto con las enramas.
Cuatro días, antes de su víspera, la familia de Leyva de la O, originaria de Saloya primera sección llegó con su tradicional regalo, un toro suizo americano, que llamó la atención por semejante ofrenda, tal como lo hacían en vida sus familiares.
El domingo, fue la enrama de los infantes por la mañana, dando inicio a la entrega de regalos a la santa.
Hoy miércoles, en su víspera la fiesta sigue con la enrama general del pueblo chontal, que abarca hasta hoy primero de septiembre; día Solemne de la virgen y en la que se espera la llegada del obispo de Tabasco, don Gerardo de Jesús Rojas López, pues oficiará misa al mediodía.
Afuera, pese al intenso calor y a veces un viento suave, hay un vaivén de gentes; unos van al templo a agradecer a la santa; otros acuden donde reparten el tradicional pozol y dulce de conserva para mitigar la ola de calor.
- Adentro, en el templo la gente escucha misa y se da tiempo para agradecer a la virgen, ubicada en la puerta principal.
Así, este día, desde temprano se han oficiado dos eucaristías, la primera se oficiará a las diez de la mañana y la segunda al mediodía y a las siete de la noche será la última.
Aunque ha comenzado a llover, la fiesta será total y en la que se esperan cientos de creyentes, que llenarán las calles movidos por la fe.