Pequeños y medianos comerciantes tanto formales como informales, se enfrentan a la otra cara de la llegada del Covid–19 a Tabasco, pues sus ventas se han desplomado entre un 50 y 70 por ciento, por lo que algunos piensan en vender objetos de valor para enfrentar la cuarentena con sus familias.
Cabe mencionar que de acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el 64.2 por ciento de la población labora en la informalidad y están preocupados tanto por el virus como por el ¿Cómo podrán enfrentarlo sin empleo?.
Las principales avenidas de la capital y en las cabeceras municipales, sobre todo en los lugares más concurridos, parques, Iglesias, escuelas, dependencias de gobierno, empresas, entre otros, son prácticamente los centros de trabajo de la informalidad que hoy padece ante el cierre temporal de muchos de estos lugares.
José “N”, quien vende tamales a las afueras del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), dijo que a partir de hoy se resguardará en su casa, pues las ventas han sido las peores que ha tenido, ya que incluso, se ha regresado con más de la mitad de sus tamales.
“Creo que voy a tener que vender un terreno, para poder sostener a mi familia de lo básico ahora que vamos a estar encerrados”, mencionó,.
Por su parte, Víctor Manuel Rodríguez, chofer de taxi, comentó que apenas y ha podido juntar lo de la gasolina que gasta en el turno que tiene, pues los usuarios cada día han sido menos del viernes, hasta ayer.
“No se cómo le voy a hacer para mantener a mi familia, me preocupa mucho el contagiarme porque el trabajo también es un riesgo, pero no hay opciones, tenemos que salir a buscar para la comida, lo malo, es que tampoco hay usuarios… eso también es lo difícil, creo que tendré que terminar en alguna casa de empeño, empeñando lo que me alcance para estar un mes en casa”, señaló.
Aunado a esto, datos de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en Villahermosa, destacan que un comercio pequeño, legalmente establecido, tiene un gasto mensual de más de 15 mil pesos, si se tiene dados de alta en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) por lo menos a tres o cuatro colaboradores, más los pagos de impuestos.
En la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en Villahermosa, hay 510 comerciantes que ya han empezado a resentir los efectos del Covid–19 en materia económica, pues desde el pasado viernes las ventas bajaron entre un 50 y 55 por ciento.
Al respecto, el presidente de Canaco – Servitur, Manuel Antonio Miranda Hernández, expuso que la mayoría de los giros de los comerciantes adheridos a la cámara son empresas de servicios jurídicos, médicos, contabilidad, capacitación, farmacias, refaccionarías, zapaterías, comercializadoras, papelerías, ferreterías, estacionamientos, estéticas, abarroteras, mueblerías, entre otros que están padeciendo por las bajas ventas.
“Todos estamos privilegiando la salud, porque tenemos claro que es mejor lamentar una pérdida económica que una pérdida humana, pues la pérdida económica se puede recuperar siempre y cuando haya responsabilidad del gobierno en apoyar”, indicó.
En este sentido, mencionó que se reunirá el gremio, para hacer una solicitud a los tres órdenes de gobierno, respecto a las acciones después de la contingencia.
“Nosotros estamos elaborando un plan de trabajo, porque esta situación va a afectar a todos en general, deja de haber ventas, circulantes… los pagos fuertes como IMSS, Infonavit, CFE, permisos de los ayuntamientos porque ahorita es la temporada en que empieza la recaudación, el pago de predial, de basura, permisos de protección civil, de libre tránsito, luminarias, entre otros gastos que se tienen…”, refirió.