El presidente Andrés Manuel López Obrador pidió primero a los trabajadores petroleros en activo todo su esfuerzo para “rescatar a Pemex”, luego extendió este llamado a técnicos e ingenieros, a los jubilados que se han distinguido por sus posiciones nacionalistas, a los legisladores y, más recientemente, a los integrantes de los organismos reguladores. El objetivo, insistió, es fortalecer a las empresas públicas y la soberanía en áreas estratégicas.
Ricardo Decle López y Fernando Olivera Zavaleta, han coincidido con Francisco Garaicochea –quien por cierto ya no es consejero de Pemex-, en la necesidad de fortalecer la capacidad tecnológica, aprovechar el talento y la inversión nacional en todas las ramas de Petróleos Mexicanos.
Desde que inició la llamada política neoliberal con Carlos Salinas, pero especialmente a partir de las reformas energéticas impulsadas por Felipe Calderón y Enrique Peña, integrantes del Comité Nacional de la Energía, como Felipe Ocampo Torrea y Alfredo Hernández Peñaloza (ya fallecido), denunciaron la dependencia a la que se condenaba a Pemex en materia de ingeniería en las diversas áreas.
CONTRA EL DESMANTELAMIENTO
Ocampo Torrea advirtió en junio de 2013 con Carlos Salinas se inició la privatización de Pemex: “Se cambió la forma de contratación y ahora Pemex no adquiere los equipos ni efectúa los concursos correspondientes. Mediante los contratos “llave en mano” delega estas actividades esenciales a los contratistas; (…) son legales, pero altamente inconvenientes para Pemex y para la nación. Ésta es la causa principal de la destrucción de la industria nacional de fabricación de equipos y de servicios de ingeniería”.
Olivera Zavaleta, quien posee dos patentes registradas en la oficina respectiva en Washington, D.C., de “tecnología mexicana” utilizada en la localización de trampas donde el aceite drena, sostiene que “las nuevas tecnologías en materia petrolera existen pero no se utilizan”.
Víctor M. Sámano L.- ¿Se abandonó la investigación en Pemex?
Fernando Olivera Zavaleta.- Se impuso primero una orden durante el salinismo para entregarle todo a las compañías extranjeras, luego vino la inercia en el uso de los equipos de ingenieros, como es el caso de la exploración y en desarrollo de campos. Con Fox, Calderón y Peña se profundizó el contratismo. Esto hizo que se adoptara el criterio de que no les puedes informar de algo nuevo que puede ser utilizado, porque se atienen a todo lo que les proporcionan las compañías que han contratado desde 1980. Como dijo Ocampo Torrea, creció la dependencia de las firmas externas para que les den el servicio.
VMS.- Se desmanteló la capacidad del Estado Mexicano.
FOZ.- Los gobiernos neoliberales lo primero que hacían es preguntarse qué hay que vender de la Nación. Todo lo remataban y Pemex no se salvó. Como el petróleo no lo podían privatizar así en conjunto lo comenzaron a hacer por partes.
VMS.- Esto hizo que la nueva administración se enfrentara al declive la extracción desde Peña y Calderón.
FOZ.- Una situación que se puede revertir, por ejemplo yendo a los campos maduros. Hay que atacar el aceite ligero que existe en esos campos; tienen una reserva remanente. Se hace parcialmente como en Samaria, donde se inyecta algo para recuperar el aceite. Pero hay que hacerlo extensivo y sólo se va a lograr con una tecnología para saber dónde está distribuido el aceite remanente; si no lo sabes te conduce a un fracaso. Los ingenieros de Pemex no lo saben porque no tiene la tecnología adecuada. Por lo mismo, porque se abandonó el desarrollo de ese conocimiento.
VMS.- ¿En realidad hay una reserva remanente? Porque se informa que yacimientos como Cantarell están en declive.
FOZ.- Es cierto, pero todos los campos tienen una reserva remanente en todo el mundo. ¿De qué cantidades hablamos?, de un 50 o 60 por ciento del aceite original que está ahí. Podemos pensar que lo que hemos extraído en cada campo es el 40 por ciento, hay aceite que se puede recuperar.
VMS.- ¿En Cantarell?
FOZ.- En el caso de Cantarell en la Sener está registrado que existe una reserva remanente de mil 500 millones de barriles. Es lo oficial. Todavía se puede sacar. Pero dónde están. Se supo que el campo Ku Maloob Zaap lo iban a cerrar, que ya había llegado a su nivel más bajo de extracción, pero ese pozo todavía tiene 600 millones de barriles de reserva. Los pozos que ya cerraron, que ya extrajeron pues ya se llenaron de agua.
VMS.- ¿Y en el desarrollo de campos nuevos?
FOZ.- Una vez que tienes un campo descubierto hay que saber desarrollarlo. Con los métodos tradicionales habrá un mayor margen de error; encontrarás agua. Mi experiencia indica que se puede ubicar la distribución del agua y del aceite en los yacimientos. Lo que yo llamo las Tecnologías Tabasco, ya ha aplicado este conocimiento. No hay tiempo que perder para usar nuevas tecnologías de una manera sistemática.
VMS.- ¿Cómo explica lo que llama Tecnologías Tabasco?
FOZ.- De manera sencilla diré que tienen dos aplicaciones: Una para el desarrollo de campos y otra para la exploración petrolera. Para el desarrollo de campos te permite determinar dónde está distribuida el agua y donde el hidrocarburo; para la exploración, dónde están las áreas nuevas con potencial de hidrocarburos.
VMS.- ¿Realmente hay áreas nuevas por explotar?
FOZ.- Como decía, debemos ir a los campos maduros; pero también claro que existen áreas nuevas. Con los métodos tradicionales se ha picoteado tanto que lo que se hace es condenar todas las áreas. Si está mal perforado un pozo exploratorio en un lugar donde no hay o hay agua eso no indica que a uno o dos kilómetros pueda haber aceite o esté distribuido de otra manera.
VMS.- Hábleme de una aplicación práctica.
FOZ.- Hemos publicado para que la gente se entere que tenemos campos propuestos nuevos exploratorios en Cinco Presidentes, en la Marina, en Reynosa, en la cuenca de Burgos, también en Villahermosa. Tenemos campos que supuestamente son nuevos que hay que ir a nominar técnicamente para que estemos seguros, tanto con los métodos tradicionales como con la nueva tecnología que efectivamente ahí vamos a encontrar nuevos campos.
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