El cachorro de solo cuatro meses fue asfixiado y jalado con cuerdas, incluso frente a policías municipales, quienes no hicieron nada por detener la crueldad animal.
El pequeño oso negro, una de las especies protegidas en México, solo había bajado en busca de agua y comida.
En redes sociales se puede ver tanto a policías como a varios hombres sonreír para las fotos.Advirtió que los responsables podrán ser acreedores a una pena en prisión y una multa económica.