Tres secuestradores quienes privaron de su libertad a un menor de 11 años y a quien asesinaron después del pago de su secuestro, fueron sacados de una comisaría de Guatemala por los ciudadanos y quemados vivos.
Los sujetos fueron identificados como Ovidio Méndez de 24 años, Selvin Pérez de 24 años y Samuel Godínez de 38 años, fueron asesinados el pasado lunes en el poblado occidental de Colotenango.
Estos sospechosos habían secuestrado a Freddy Méndez el 12 de agosto y habían pedido un rescate de 19,500 dólares a cambio de su liberación, según la Policía Nacional de Guatemala.
Ante investigaciones se cree que estos secuestradores habían atacado al menor porque su padre actualmente se encuentra trabajando en Estados Unidos y con frecuencia el enviaba dinero a su familia para la construcción de una nueva residencia.
Pidieron rescate enviando imágenes del menorLos secuestradores enviaron como prueba de que el niño estaba vivo una imagen donde se veía a Freddy y a uno de los sospechosos sosteniendo una escopeta. Ante esto la familia procedió a pagar el rescate, pero el niño nunca regresó con su familia.
Ante esto los vecinos furiosos capturaron a tres de los sospechosos y los entregaron a las autoridades locales. Este grupo irrumpió en el recinto policial, abrumó a los policías y se llevaron a uno de los hombres a la fuerza.
Finalmente lo golpearon, le rociaron gasolina y le prendieron fuego después de que este hombre confirmara que Freddy Méndez estaba muerto cuando le dieron un tiro en la cabeza y lo habían enterrado en una fosa.
Justicia de propia manoCiudadanos furiosos que buscaban hacer justicia por sus propios medios, regresaron a la estación y sacaron a rastras a los otros dos sospechosos y repitieron la misma acción que hicieron con el primero.
Incluso prendieron fuego a una de las casas de los sospechosos. Este miércoles lograron recuperar el cuerpo de Freddy Méndez, según informaron medios locales.
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