Después de dejar a sus hijas en la escuela, Antonina salió a trabajar en las calles de Nezahualcóyotl donde murió al ser alcanzada por un vehículo de carga. Ella vendía refrescos a bordo de una motocicleta en la que fue arrollada.
Los hechos
En la colonia Evolución, la mujer cumplía con el primer recorrido del día. Aún no llegaba a su destino cuando se encontró con un semáforo en rojo de la avenida López Mateos.
Ahí casi en el cruce con la avenida Escondida, la mujer se detuvo detrás de un microbús de la ruta 31.
Mientras la víctima y el chofer del trasladado público esperaban el verde del semáforo, un camión de carga se acercó a la esquina.
Sin lograr frenar, el vehículo de carga arrollo a la motociclista. El golpe prensó el cuerpo de Antonina y a la motocicleta, contra la parte trasera del lado izquierdo del microbús.
Tras escuchar el estruendo, el conductor y los testigos vieron al conductor del camión de carga que aceleraba para escapar.
Al asomarse se percataron de que la mujer de unos 45 años yacía en el pavimento.
Por eso pidieron ayuda de los paramédicos que al llegar al sitio indicaron que ella había muerto.
La víctima vestía uniforme de una empresa de refrescos en la que levantaba los pedidos.