*San Fernando: última palabra, un recorrido para recuperar el alma
*A la violencia brutal una respuesta de ternura y solidaridad
*En México, sólo cuatro de cada cien delitos son investigados
"EN MÉXICO es más peligroso investigar un crimen que padecerlo". Con estas duras palabras, y dramáticamente ciertas, se refirió el poeta y periodista John Gibler a la realidad de nuestro país, cuenta Marcela Turati. Dicho que fue comprobado por la propia periodista al tener acceso al Tomo 221 de una averiguación previa...en la que la PGR la señalaba como sospechosa de secuestro en el caso de las masacres que Turati investigaba. También aparecían como sospechosas Ana Lorena Delgadillo, abogada mexicana de derechos humanos, y Mercedes Doretti, antropóloga forense argentina.
El mundo al revés: quienes investigaban una masacre, la ocurrida en San Fernando Tamaulipas –hilo conductor a otros hechos similares-, estaban bajo la mira de la policía. En ocasión de la presentación en Villahermosa del libro "San Fernando: última parada. Viaje al crimen autorizado en Tamaulipas", agregué a lo dicho por Gibler: también en México es más peligroso denunciar un delito. No digo nada nuevo si consigno un secreto a voces: las redes delincuenciales han penetrado al sistema mexicano.
UNA REALIDAD QUE ESTREMECE
LAS ESTADÍSTICAS LO CONFIRMAN: en octubre del 2013 la organización México Evalúa documentó que en la "justicia penal" la impunidad no sólo predomina, crece: la media nacional en 2021 fue de 91.8 y en 2022 llegó a 96.3%, un incremento de 4.5 puntos porcentuales. Sólo cuatro de cada cien delitos son investigados, ¿cuántos llegan a una sentencia?
Uno se pregunta dónde radica la impunidad y México Evalúa responde: falta de atención, investigación y/o resolución de casos que son conocidos por la autoridad.
Por delitos, la "impunidad específica" tiene estos indicadores: violencia familiar, 98.6%; desaparición de personas, 96.5%; extorsión, 96.4%; y abuso sexual, 96.1%. Observamos cómo la desaparición ocupa los primeros lugares y es el tema central investigado en uno de sus aspectos más dramáticos por Marcela Turati a quien agradecimos haber aceptado la invitación para presentar en Villahermosa su libro sobre los crímenes en San Fernando, Tamaulipas. Es una obra que sin duda estremece, o debe hacerlo, nuestra conciencia a la vista del horror y la impunidad.
Muy atento el público que acudió a la presentación y que llenó el salón del Hotel Viva. Escuchó de viva voz la experiencia de una periodista que un día de marzo de 2011 fue asignada para realizar un reportaje sobre una tragedia más propiciada por "la guerra contra las drogas", pero que a la vista de las víctimas y las circunstancias dedicó 14 años a documentar "los impactos de la violencia en la vida de las personas". A pesar de los riesgos.
Advierte que si bien "el punto de partida de este recorrido son las fosas que escondían los cuerpos con el cráneo roto y la expresión de desamparo encontradas en 2001. Esa primera parte –señala- es difícil de leer".
"Pero –agrega en el prólogo-, esta no es sólo la historia de una tragedia. No se queda en la destrucción, los cadáveres y los sufrimientos de la gente. Si la primera parte permite entender cómo opera el sistema que tortura y revictimiza a las víctimas, la segunda muestra los lazos de amor y de solidaridad que se tejieron alrededor de esa muertes". Es un testimonio de ternura, valentía y dignidad.
NO PERMANECER INDIFERENTES
Escuchamos a Marcela con atención, en su estilo pausado y evidentemente afectado aún por lo que lo tocó ver y vivir, pero también en un recorrido que continúa para no estar "despalabrada", para entender dónde quedó secuestrada su alma "en este México doliente, donde muchas personas quedan secuestradas para siempre".
Como dijo muy atinadamente la doctora Gisela Pérez Fuentes, presentadora del libro: "La obra nos guía por un sitio tomado por la delincuencia organizada que actúa a la luz del día, con autoridades que los encubren o que miran en dirección distinta para acentuar el silencio que deja la impunidad, desarticulando el tejido social, una realidad que autoridades, empresarios y políticos conocen, pero bajo el amparo de la complicidad dejan pasar, haciendo natural esta forma de vida". Un relato coral –refirió-, un entramado de muchas e inquietantes historias; pero también una muestra de cómo se construye la historia con la voz colectiva.
La presencia de Marcela Turati fue también posible por el apoyo del Consejo Ciudadano del Premio Nacional de Periodismo que estuvo representado por Karla Edith Aguilar Padilla, con quien sostuvimos una valiosa conversación junto a Erasmo Marín, quien gestionó la visita y Alfonso Valdivia, entre otros amigos.
AL MARGEN
La presentación de "San Fernando: última parada", forma parte de la serie de actividades que realizamos en conmemoración de los 65 años de Diario Presente, un periódico –como usted sabe- fundado un 12 de febrero de 1959 por un grupo de periodistas y entusiastas de la cultura encabezado por don Jorge Calles Broca.
Sin perder sus raíces, Presente ha sorteado diversas crisis. Ha sido reflejo de su tiempo y de las contradicciones de diversas etapas en la vida del estado y del país.
Lo importante para nosotros –y así queremos que sea para nuestros lectores y para la comunidad- es que sigue vigente y renovando su compromiso con quienes habitan Tabasco y la región. Presente surgió cuando Villahermosa tenía unos 50 mil habitantes y Tabasco no llegaba a los 500 mil pobladores. Mucho ha cambiado. (vmsamano@hotmail.com)