Hace algunos días en este mismo espacio, comentamos que la elección presidencial del 2024 no se apartaría de Palacio Nacional como fiel reflejo de la única caja de resonancia política en el país vigente en tiempos de la 4T.
Es decir, Andrés Manuel López Obrador desde la mañanera vs la, o el abanderado opositor.
Lea usted pues algunas interesantes aristas que se han ido puliendo en el panorama, del que desde luego no podemos separar; ni la conmemoración de los 5 años de la victoria morenista de 2018, con la sucesión guinda; ni la proyección del candidato o candidata opositora.
Partiendo de la única foto hasta el momento de las seis "corcholatas" juntas a lado del dirigente nacional de su partido Mario Delgado frente a Palacio Nacional, se evidencia desde luego que esta elección que viene, también se medirá con llenos en el zócalo capitalino.
¿Mensajes? Bueno, destacar más que el discurso político del presidente, la participación de DOS MUJERES - Luisa María Alcalde y Delfina Gómez- en la conmemoración del arribo de la 4T al sistema político mexicano.
Forma y fondo, para muchos analistas con esta acción AMLO marcó la ruta del género en la sucesión, al bajar como orador al líder y dirigente de su partido, subiendo a dos emblemáticas figuras femeniles de la 4T en un acto de cara a la militancia de su partido y de la opinión pública nacional.
Salvo que el tabasqueño este "fintando", pasaríamos al escenario subscuente de esta trama sucesoria con la aparición de Xóchilt Gálvez en la banda opositora.
Hasta diciembre de 2022, la Senadora panista era una de las fuertes aspirantes al gobierno de la Ciudad de México. "El golpe de timón" lo marcó su primera "contrarréplica" al Presidente Andrés Manuel López Obrador, al intentar enfrentarlo en la "mañanera" el pasado 6 de junio.
En menos de un mes, Gálvez, la panista de origen indígena, no solo opacó mediáticamente las campañas de las corcholatas de Morena; de paso, dejó hablando solos a Santiago Creel y Enrique De la Madrid quienes buscan ser abanderados de la "Alianza por México".
El Presidente solo le puso la cereza al pastel al anunciar que Xóchilt será finalmente la candidata de la alianza contra Morena. No sería sorpresivo, desde el 2000, la panista es "oro molido" en debate mediático, mal hablada como Fox e irreverente como AMLO, extraña pero marcada combinación.
Para medios de comunicación, su estilo de hacer política da "color" en una campaña desde cualquier ángulo. Se le da la publicidad gratuita a favor y en contra. En caso de confirmarse, su estilo es un auténtico "dolor de cabeza" para cualquier abanderado enfrente.
Si es o no pues el tiempo de las mujeres en el caso de la sucesión presidencial, la ruta estaría maá que marcada con tantas señales por todos lados, en un bando y en el otro.
En tanto se define la sucesión guinda, los escenarios han comenzado a aclararse. Morena marcha ya sin la posibilidad de que algunas de sus "corcholatas" brinque la cerca hacia la "Alianza va por México" en caso de un berrinche.
Si alguno "salta las trancas" sólo quedaría Movimiento Ciudadano, que de paso, ya comenzó a coquetear con Xóchilt, aún cuando el corazón naranja de Dante esté más cerca del purpura.
Veremos.
Kybalión.- Primero el Proyecto.
Las corcholatas presidenciales no estuvieron en templete el pasado sábado en el zócalo capitalino. Alineadas si, enfrentito del tabasqueño en primera línea de combate.
Anote usted también a las "corcholatas chocas" que estuvieron en esa primera fila de invitados especiales, que de ahí, saldrán las primeras encuestas:
César Raúl Ojeda Zubieta, Javier May Rodríguez, Marcos Rosendo Medina Filigrana, Mario Llergo Latouernerie, Manuel Rodríguez González y Yolanda Osuna Huerta.
Ahí, juntos pero no revueltos. Esperando el arranque septembrino.