La comunicación gubernamental, enseñan los manuales de ciencias políticas, debe trascender personalismos y tener visión institucional. ´Lo colectivo impone seriedad y ruta compartida´, es la idea dominante. Desde esta perspectiva, quizás el empantanado caso Notimex resulta otro rasgo ´especial´ en la forma de comunicar del Presidente López Obrador.
AMLO dejó a su aire la agencia de noticias del Estado Mexicano, Notimex, y se concentró en las conferencias matutinas como instrumento de comunicación. Pueden comprenderse las razones políticas de la decisión, visto el desgaste de credibilidad de Notimex a través de 6 décadas de labores con tono obsequioso y acomodaticio. Sin embargo, lo que no necesitó AMLO pudo ser vital para su relevo en Palacio Nacional.
La información pública es insumo vital de la población ciudadana. Las élites se allegan información privilegiada, harina de otro costal. Por lo menos, en el tema que nos ocupa. El Estado mexicano garantiza en los artículos 6º y 7º constitucionales el derecho a la libertad de expresión y el derecho a la información. Para ello, además de propiciar un entorno de libertades, el Estado tutela una agencia de noticias para difundir información pública que se quiere veraz y valiosa. Lo expresa en su misión/objetivo el informe anual de actividades Notimex 2010: "Coadyuvar al ejercicio del derecho a la información mediante la prestación de servicios en materia de noticias al Estado Mexicano y a cualquier otra persona, entidad u organismo público o privado, nacional o extranjero, con auténtica independencia editorial". Suena muy profesional, pero...
Por lo anterior, más los tiempos de austeridad y cambio de régimen, llama la atención el conflicto prolongado -3 años y dos meses- en la agencia de noticias gubernamental, Notimex. Los recursos públicos destinados a esta agencia de noticias en paro, independientemente de su calidad periodística, pueden terminar en pago de demandas, prestaciones y salarios caídos, si la Secretaría del Trabajo -que validó una huelga- lo considera pertinente. Lo que no podrá recuperarse es el tiempo de trabajo de Notimex y los servicios informativos prestados la población. Tres años de nula cobertura. Se trata de un lunar institucional en el proyecto de nación de la 4T, por lo que toca a derechos laborales y derecho a la información.
UN LARGO CONFLICTO
En varias ocasiones, el Presidente López Obrador planteó: "está por llegarse a un acuerdo entre las partes, por la vía del diálogo". Los anuncios se dieron en marzo de 2021, agosto de 2022 y enero 2023. El lunes 4 de abril, AMLO insistió en que "el acuerdo es viable". Más allá de las intenciones conciliadoras del Presidente, hay que decir que el litigio Notimex es intrincado, con información contradictoria y desconcertante por lo que hace a quién le asiste la razón laboral. Ambas partes se acusan de acciones ilegales: "malversación de fondos", "aviadores", "reparto indebido de plazas", son los cargos contra los trabajadores; "abuso de autoridad", "violaciones al contrato colectivo de trabajo" y "despido injustificado de 250 trabajadores", son los cargos contra la dirección de Notimex.
Desde febrero de 2020, se presentó un choque frontal entre la directora de Notimex Sanjuana Martínez (designada por AMLO en marzo de 2019) y el Sindicato Único de Trabajadores de Notimex (SUT Notimex) que encabeza Adriana Urrea. Las versiones de parte y parte se filtraron a los medios; antes que claridad legal en torno a lo disputado, lo que se tuvo fue ruido mediático que enturbió cualquier intento de negociación seria. El llamado a la huelga fue revirado por actas de abandono de trabajo. Un lío de muy padre y señor nuestro, justo cuando más necesitaba la 4T una cobertura noticiosa que difundiera puntos centrales de las conferencias presidenciales.
Origen y (de)función: la agencia Notimex surgió en 1968 para dar cobertura a los juegos olímpicos celebrados del 12 al 27 de octubre en la capital. Las fechas son significativas: sería interesante conocer el tipo de cobertura que realizó Notimex al movimiento estudiantil y las protestas que abarrotaron calles y plazas de México en esos días. ¿Sonidos del silencio?
Eran otros tiempos. Sexenio a sexenio, la agencia Notimex realizó trabajos desiguales de calidad periodística. Pese al desnivel, los servicios informativos de Notimex brindaron una función de cobertura extraterritorial a medios locales sin corresponsales, y a medios internacionales que requerían lo sucedido en México. También, "Notimex ofreció una cara informativa de América Latina para el mundo". (Álvaro Delgado).
CIERRE ¿DEFINITIVO?
Entre los derechos laborales (que los trabajadores reivindican) y la denuncia de "mafias enquistadas" (que pregona la junta de gobierno de Notimex), la mesa de diálogo (Secretaría de Gobernación y Secretaría del Trabajo, mediadores) no avanzó y la verdad quedó atorada. El presidente López Obrador finalmente confirmó que la agencia de noticias gubernamental desaparecerá. ¿Qué hará la administración que inicie en 2024?, ¿seguirá con las conferencias matutinas?