CALOR EN TABASCO arriba de los 40 grados Celsius. Y sensación térmica arriba de los 50. No es para menos nuestra y vuestras quejas. Algunas muertes por golpe de calor en Macuspana y Huimanguillo (2 de los 17 municipios de Tabasco). Muchos desmayos en iglesias, escuelas y campos deportivos. Como si fuera el inicio de algo más terrible, que no alcanzamos a ver; no aún. Solo que algo hay qué hacer. ¿Se puede hacer algo? Sí, claro. Solo que para eso se requiere, como requisito, tener conciencia del problema que tenemos.
AUMENTA LA VENTA de agua, de pozol, suero oral, cerveza y de refrescos embotellados. Todos andamos con el sudor en todo el cuerpo. Y la vida parece seguir como si nada. Salvo que teóricamente se habla del cambio climático, del derretimiento de grandes masas de hielo en los polos. Y los gobiernos en las nubes, y los directivos de las grandes trasnacionales en su burbuja. ¿Y el ciudadano?, quejándonos de los calores que ahora sí se pasaron.
ESTO NO ES PROPIO de alguna región específica. Sino es general. Las noticias nos hablan de tormenta de calor que durará varios días más. Uno ve los campos secos. Poblados -los que quedaron inundados por la construcción de presas- están emergiendo ante el constante bajar del nivel del agua. Se mira por allí la foto de las torres de una iglesia, y al paso de los días se miran otro tanto más de la construcción.
¿SE ACUERDA QUE lo hemos estado diciendo? Rellenos de popales, de partes bajas, vertedero de aguas negras a lagunas, a ríos. Desecación de lagunas. Rellenos de las orillas de dichos cuerpos de agua para "ganarle" terreno y aumente la plusvalía a la propiedad. Los cambios legales en el uso de suelos, previa mochada. Tirar árboles por todas partes. Asesinar áreas verdes y convertirlas en planchas de concreto, como símbolo de la modernidad. Masacrar árboles porque tiran muchas hojas y hay que barrerlas. Etc.
EN TIEMPOS DE FRÍO, donde hace mucho, las familias pobres se calientan con leña y carbón. Y al dejarlas encendidas en las pequeñas habitaciones, amanecen muertos, envenenados por los monóxidos que se desprenden de la combustión. Nos enteramos acá de una familia que falleció dentro del auto a causa de respirar ese mismo tipo de gases. Como no tenían energía eléctrica, optaron por dormir en el auto encendido para que funcionara el aire acondicionado, y amanecieron muertos los padres y una niña. Tragedia.
PODEMOS HACER MEMES sobre el exagerado calor, si queremos, y entretenernos mientras tanto, pero si nada hacemos en lo individual, los pequeños actos que sumados de muchas personas, hagan cambios en el modo diario, seguiremos no igual, sino peor cada vez más. Mutantes hacia el declive, diría Alessandro Baricco. Y al parecer no hay retorno. Mientras tanto no podemos ni debemos cruzarnos de brazos.
SE CUENTA LA FÁBULA del colibrí que ante el incendio vio que todos los "animales" huyeron. Y él se dijo a sí mismo: "yo tengo que hacer algo". Y trasladó gotas del río para lanzarlas al incendio. Y todos se burlaban de él, en lugar de ayudarle. Sí, es una fábula, pero es una enseñanza. Se cuenta asimismo de los docentes que ante una conferencia, al finalizar esta, empezaron la retahíla de quejas, sobre las culpas a los otros, y se escuchaban interminables. Ya al final, el conferencista dijo, sonriente: "tienen toda la razón, pero a mí me queda la satisfacción al final de la jornada, de decir: "yo hice mi parte".
TENGO UN AMIGO QUE piensa en todo eso, en qué hacer. Trabaja afanosamente para educación. Escribe sus apuntes sobre el tema del cambio climático. Y se desespera. Le digo: "sigue con tus charlas, así te escuchen cinco o diez personas. Te ha de quedar siempre la satisfacción de que tú estás haciendo tu parte. Y de seguro algunas otras personas están haciendo su parte, aunque tú no lo sepas". Tengo otro amigo que sale a correr y va levantando la basura a orillas de un río. Pequeños actos que si todos nos sumamos lograremos cambios, sin duda alguna.
SE REQUIERE CONCIENCIA, y esta no anda como que en abundancia. Ya no digamos de conciencia sobre el cambio climático, el desorden social, el fracaso de la educación en general (de la sociedad en su conjunto) y de la resistencia en los centros escolares. Sino de la existencia humana misma. Y a esto hay que seguirle apostando. Si todo viene desde antes. Desde que se plantea como triunfo y éxito el tener dinero por sobre el crecimiento del ser. Entonces andamos en el mundo del revés: dañando a la naturaleza en lo poco nosotros, en lo mucho las grandes trasnacionales, y quejándonos del calor exagerado que parece como que andamos en la rosticería y nosotros somos los pollos y la carne por asar.
PODERNOS QUEJARNOS siempre. Eso es fácil. Adquirir conciencia es más difícil. Adaptando en lo esencial el poema de Sor Juana Inés De la Cruz: "¿qué humor puede ser más raro/ que el que, falto de consejo,/ él mismo empaña el espejo/ y siente que no esté claro.../ Bien con muchas armas fundó/ que lidia vuestra arrogancia,/ pues en promesa e instancia/ juntáis diablo, carne y mundo".