Con solo seis años de edad, Sophia hizo historia en México convirtiéndose en la primera niña transgénero en México que pudo cambiar oficialmente su nombre y su género en su acta de nacimiento sin necesidad de ir a un juzgado.
En la Sierra Negra de Puebla, Sandra y su gemela Verónica, tuvieron un caso similar, pasar a tener nombres de hombres a mujeres. Aunque su travesía estuvo llena de problemas como enfrentarse a tabúes, ignorancia y creencias en contra de su condición que terminó en violencia, rechazo y discriminación, por lo que tuvieron que salir de su casa, abandonar la comunidad para refugiarse en otra.
En Tabasco, a principio de mes, una joven llamada Cynthia hizo lo propio, entró en un proceso jurídico para lograr convertirse en la primera persona en la entidad en cambiar de género, y tener en sus manos un acta de nacimiento que la identificara como tal.
En una entrevista habló que desde pequeña no sentía ser hombre, siempre tuvo los gustos femeninos, pero sabía que algo le faltaba para estar completa, y era el cambio de género. Al lograrlo y darlo a conocer, Cynthia fue objeto de la homofobia en las redes, a tal grado de recibir insultos, sobre todo de la misma comunidad lésbico-gay, así como de mujeres.
A pesar de todo, sostiene que seguirá con su vida normal, y aunque sabe que enfrentará otras adversidades, afirma que lo mejor es conocer hacia dónde va uno como persona, tener cimentado los valores, no confundirse, seguir la intuición de lo que le hace sentir mejor, y si hay personas que quieren su cambio de identidad deben luchar.
Armando Cornelio Dionisio, integrante del Centro Comunitario para la Inclusión, dijo que definitivamente el país no está preparado para recibir una noticia de esta índole.
Recordó que Tabasco igual tuvo su primera boda gay el año pasado, tanto de hombres como mujeres, en diferentes momentos, y no fueron aceptados por la sociedad.
“Falta sobre todo educación, y se debe empezar desde abajo para que no exista la discriminación, y son a las nuevas generaciones con las que se debe trabajar”, señaló el activista.
Sostuvo que también es importante la sensibilidad para entender las diferencias, y que son modos de vida que se tendrán a diario, y por tal motivo se debe entender.
El abogado Armando Lázaro Hipólito, quien ganó el caso de Cynthia, dice que el hecho de que se la hayan reconocido sus derechos como mujer transgénero es un acto de elemental justicia, “el protocolo de actuación en estos casos que manejan los magistrados del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), para evitar la discriminación por la orientación sexual y la identidad de género, es el de respeto al libre desarrollo de la personalidad, identidad de género, orientación sexual, derecho a la no discriminación y acceso a la justicia al debido proceso”.
PARÉNTESIS
GRUPOS de personas están explotando a niños en las calles. La denuncia es hacia quienes dejan a tres pequeños sobre la avenida 16 de Septiembre con César Sandino. Les dan una guitarra y los obligan a lo que se conoce como mendicidad forzada. A estos niños los han visto desde las nueve de la mañana hasta las seis de la tarde pidiendo dinero en condiciones miserables.