Garantizar la igualdad de los géneros en la participación política representa más que solo cuotas cuantitativas, definitivamente existe una gran necesidad de contar con políticos profesionales, que representen a la sociedad cumpliendo con los conocimientos del qué hacer político, que es muchísimo más que lo que llaman "grilla".
La política es el arte de lo imposible y no como algunos dicen, el "acto de comer mi**da sin hacer gestos". La POLÍTICA representa la plena confianza en quienes se deposita el poder de luchar por los intereses del pueblo y no de unos cuantos. Sabemos que lamentablemente existen algunos vicios, costumbres y acuerdos. Pero se trata de trabajar de manera honesta para equilibrar las clases y construir una mejor sociedad. Que los que más necesitan dejen de necesitar tanto y que los que tienen sigan teniendo, pero no a costillas de otros.
Menciono lo anterior porque por años nuestro país ha sido cuna de presidentes, ha gobernado un patriarcado y con la casi segura llegada de Claudia Sheinbaum a la silla presidencial; estaríamos experimentando un gran salto a la democracia femenina. Que ha costado épicas luchas de mujeres por votar y ser votadas, lo que generó políticas para establecer cuotas.
Debemos reconocer que sin duda las mujeres tenemos la visión de políticas que abracen a las familias, de valores y respeto, con administración y equilibrio económico, de seguridad, igualdad y equidad. Y vaya que lo tenemos presente, puesto que es lo que tanto ha costado.
Ahora más que nunca, en nuestro país la eficacia de la mujer será un gran reto que marcará la pauta para las futuras representaciones y participación de la mujer en democracia.
Esta acción se trabaja desde la Organización de las Naciones Unidas, donde el objetivo fundamental es precisamente que la participación de las mujeres en todos los niveles de gobernanza democráticos, -que desde mi punto de vista debe ser gobernabilidad- responda de manera oportuna y eficiente para las resoluciones de problemáticas sociales.
En todo el mundo, el Fondo de las Naciones Unidas para la Mujer (UNIFEM), trabaja para promover la capacidad de las candidatas y trata de establecer un enfoque que atienda el concepto de género en las instituciones principales dentro del contexto de las elecciones, como, por caso, en las comisiones electorales y los medios de información, que en ocasiones cometen actos discriminatorios.
Basta con mirar atrás y reflexionar sobre la participación de la mujer en los hechos trascendentes y su esfuerzo por transformar las condiciones sociales y políticas en las distintas etapas de nuestra historia.
Estuvieron presentes en la independencia de México, de igual manera las encontramos al frente de ejércitos, combatiendo contra los españoles o contra invasores norteamericanos o franceses. También como parte de los servicios de información alertando a los insurgentes, liberales o revolucionarios sobre las posiciones y actividades del enemigo. Como propagandistas, periodistas, militantes políticas y finalmente en la primera mitad del siglo xx como feministas, luchando por la igualdad de las mujeres en el trabajo, los sindicatos, los cargos públicos y los puestos de elección popular.
Así que todas estas mujeres abrieron el camino para que se lograra el voto y se pudiera participar en los cargos de elección popular
En el siglo XXI el reto es gobernar con eficacia. Las mujeres tenemos el gran compromiso con nosotras mismas de demostrar con lealtad, responsabilidad y honor que la lucha por la participación de las mujeres en las actividades políticas y sociales no ha sido en vano. Con la Doctora Claudia Sheinbaum y muchas otras féminas al frente de cargos de elección popular, de toma de decisiones, directivos, administrativos y demás quedará de manifiesto que las mujeres podemos gobernar para todos.